Caracas.- Jhonny Díaz, de 30 años, el domingo 10 de agosto del 2019 salió de una fiesta en Filas de Mariche. Cuando se dirigía a su vivienda, discutió con un amigo que era sobrino de un funcionario de las Faes y le ganó la pelea. En revancha, el joven fue en búsqueda de su tío. El funcionario fue al local, y mató a Johnny de tres disparos. Este joven es una de las 898 muertes violentas que hubo en Caracas durante 2019, y una de las 340 cuyo victimario fue un efectivo de seguridad del Estado.
Del 1° de enero al 31 de diciembre de 2020, de acuerdo con la data de Monitor de Víctimas, 898 ciudadanos perdieron la vida en los cinco municipios del Área Metropolitana gracias a la violencia, para una tasa de 30 víctimas por cada 100.000 habitantes. El monitoreo, reportó un descenso en el número de muertes en comparación a 2018, año en que periodistas registraron 1.364 homicidios.
Jhonny Díaz, quien fue asesinado por un funcionario de las Fuerzas de Acciones Especiales (Faes), de acuerdo con la denuncia de sus familiares, fue una de la de las 340 víctimas a mano de uniformados en 2019. Cuerpos de seguridad del Estado, a través de los móviles ejecución extrajudicial y resistencia a la autoridad, se convirtieron en el principal victimario del año pasado, pues fueron los responsables de al menos 38% de las muertes violentas que se contabilizaron en los cinco municipios de la Gran Caracas.
Pese a la cifra, de acuerdo con Monitor de Víctimas, las ejecuciones y resistencia a la autoridad disminuyeron en 2019, en comparación al 2018, dónde ambos móviles representaron 41% de las víctimas en Caracas. En 2019, de esos 340 homicidios cometidos por cuerpos de seguridad del Estado, 263 fueron ejecuciones extrajudiciales y 77 por resistencia a la autoridad.
De estas 340 víctimas, 232 (68 %) fueron a manos de las Fuerzas de Acciones Especiales (faes). Es de recordar, que el mismo fue ordenado a disolver por parte de la Alta Comisionada de los Derechos Humanos, Michelle Bachelet, quien el pasado 4 de julio, en un informe que publicó tras su visita a Venezuela, expresó que la administración de Nicolás Maduro pudiera estar utilizando este cuerpo, y posiblemente a otras fuerzas de seguridad, «como parte de una política de control social«.
Pero no solo las Faes fueron referencia de la letalidad policial, el Cuerpo de Investigaciones Científicas Penales y Criminalísticas (Cicpc) también recibieron la denuncia de haber sido los victimarios de, al menos, 71 civiles. Las cinco policías municipales de la Gran Caracas (Libertador, Baruta, Chacao, El Hatillo, y Sucre) fueron señaladas por cometer 15 homicidios.
En su informe, Monitor de Víctimas expuso que no pudo determinar cómo se generaron 189 homicidios, y este número conformó el segundo móvil. El robo, que durante 2017 fue la causa de muerte más común, en 2019 fue la tercera causa de muerte con 155 víctimas, de los cuales 144 fueron civiles y 11 funcionarios, que en su mayoría se encontraban franco de servicio. El cuarto móvil fue el ajuste de cuentas o venganza.
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Según las cifras de Monitor de Víctimas, en casi todos los móviles disminuyeron los números en comparación a 2018, pero la violencia de generó se incrementó. En 2019 se registraron 20 feminicidios, una subida de 54%, pues en 2018 se contabilizaron 13.
Es de destacar que como resultado a estas 898 muertes violentas que se registraron en Caracas durante 2019, unos 776 niños quedaron huérfanos
Libertador sigue siendo el más violento
Fernando Alonso Delgado, de 51 años, fue un comerciante y exconductor de Empresas Polar que se resistió a un robo y no vivió para contarlo. El pasado 16 de febrero de 2019 asistió a una fiesta en el centro de Antímano, municipio Libertador. Allí se encontró con dos miembros de su familia y con ellos regresó a su residencia ubicada a poca distancia del Seguro Social de la zona.
Una vez dejaron estacionado el vehículo, en uno de los puestos que sobraban en la calle, Alonso Delgado y sus dos familiares fueron asaltados por tres sujetos armados. Los hombres despojaron a sus parientes de sus billeteras, teléfonos celulares y otras pertenencias de valor; pero cuando llegaron a Carlos éste se resistió a entregar su dispositivo móvil y los victimarios le dispararon dos veces en la frente.
Alonso Delgado fue una de 567 muertes violentas que se registraron en el municipio Libertador en 2019, es decir, 63% de las 898 que hubo durante el año, y que lo situaron como el más violento del Área Metropolitana. El municipio Sucre, del estado Miranda, se ubicó en el segundo lugar, con 255 casos (28%).