El Tigre- Como José Gregorio Barrios Carrasco, de 22 años de edad, quedó identificado una de las tres personas asesinadas en Santa Elena de Uairenel pasado sábado 23, en medio de los hechos violentos que se suscitaron después del cierre de la frontera de Venezuela con Brasil.
El joven era nativo de la ciudad de El Tigre, sur de Anzoátegui, y tenía cuatro meses viviendo en Santa Elena de Uairén, a donde fue junto con su pareja a trabajar para sostener a su familia.
Así lo afirmó la tarde de este lunes 25 a El Pitazo su progenitora, Mélida Carrasco, quien entre lágrimas y desde su humilde vivienda, ubicada en la novena carrera Sur, cruce con quinta, contó que aún el cuerpo del mayor de sus dos hijos permanece en Santa Elena por falta de dinero para su traslado.
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Desconsolada por la pérdida de su muchacho, relató que se enteró el mismo sábado de que habían matado al joven, y desde entonces empezó su calvario. «La impotencia que tengo es horrible. Yo quiero tener a mi hijo aquí; no quiero que me lo traigan en un ataúd«, dijo.
Mélida Carrasco recordó que el sábado no habló con su hijo, sino con la esposa, Mileidys López, quien le dijo que la «cosa estaba fea» allá. Luego, en la noche, recibió un mensaje de texto de parte de un amigo, quien le avisó que habían matado a su hijo.
«Él (José Gregorio) salió en su moto, que compró allá vendiendo café, y le dispararon unos guardias. Le metieron un tiro en la cara y me lo mataron», aseguró Carrasco.
«Yo le reclamé a la esposa por el hecho de que me lo dejó salir. Ella me dijo que José salió al centro, y cuando pasó por el comando en la moto, los guardias le dispararon en la cara. Cuando cayó, agarraron la moto y la metieron en el comando», apuntó.
La madre de la víctima precisó que Mileidys López fue a reclamar la moto para venderla y así poder cubrir los gastos de traslados del cuerpo. Pero le dijeron que era un «guarimbero». «Afirmaron que mi hijo se había enfrentado con ellos, pero él solo se fue allá a trabajar», contó.
Traslado millonario
Mélida Carrasco agregó que a la esposa de su hijo le estaban cobrando 1.000 dólares por el trasladado del cadáver hasta El Tigre, razón por la que este lunes a primera hora salieron a buscar ayuda. La pareja de la víctima se comunicó al mediodía y dijo que consiguió que una funeraria le cobrara 700 y que solo le faltaba conseguir 250, porque ya había logrado reunir 450.
José Gregorio Barrios Carrasco vivía en una humilde vivienda | Foto:
Marinelid Marcano
La media hermana de José Gregorio, Álida Barrios, destacó que estaba previsto que el cuerpo de la víctima lo sacaran de la morgue de Santa Elena de Uairén a las 4:00 p. m. rumbo a San Félix, donde esperaban que lo embalsamaran. Luego, mañana martes, esperan poder continuar hasta El Tigre.
La familia Barrios Carrasco espera la ayuda de la comunidad y de quienes puedan aportar para lograr el traslado de su pariente, quien tenía pensado regresar a El Tigre pronto para festejarle el primer cumpleaños de su pequeña hija Alana. Es la misma niña que este lunes 25 tenía una cinta negra puesta en su muñeca derecha y su pie izquierdoen señal de luto por su papá.
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