Amazonas. – “No tengo las palabras ahorita para hablar de eso…” dijo con voz entrecortada Milagros Sanoja, madre de uno de los 13 ocupantes del helicóptero extraviado en Amazonas desde el 30 de diciembre de 2016.
El 2 de mayo, Sanoja recibió la noticia de que la aeronave había sido encontrada, “pero no nos han dicho más nada y yo… yo no quiero hablar de eso”, aseveró tres días después del anuncio.
Lea también:AUDIO | Helicóptero de Amazonas fue hallado en zona que no formaba parte de su ruta original
Habla con dolor, no sólo por los cuatro meses que tiene sin ver a su hijo de 19 años, desde que el helicóptero MI-17V5 desapareció ese 30 de diciembre de 2016, sino porque el comunicado del Ministerio de Defensa, que informó al país de la noticia, dio pocas explicaciones sobre el hallazgo y, además, incluyó la frase “con pocas posibilidades de sobrevivientes”.
Este sábado 6 de mayo, a través del Twitter @prensaFANB, el despacho confirmó que “fueron evacuados del sector Caño Yagua ocho cadáveres de los posibles tripulantes y pasajeros de la aeronave de ala rotatoria MI-17V5, siglas EV-0796, desaparecida el 30 de diciembre”.
Según el comunicado del 2 de mayo, el avistamiento de la aeronave en el sector Caño Yagua fue el pasado 29 de abril.
Lea también:Hallan restos del helicóptero desaparecido en Amazonas
Tras cuatro días de silencio, durante los cuales ni siquiera los familiares supieron del avance de la noticia, el Ministerio de Defensa vuelve a referirse al caso, esta vez, para informar que ocho cadáveres fueron trasladados a Puerto Ayacucho “a la espera de ser identificados oficialmente”, mediante exámenes médico forenses.
Vale resaltar que faltaría por ubicar cinco cuerpos más para completar los 13 ocupantes de la aeronave siniestrada.
En el lugar del hallazgo, según el parte oficial, los militares encontraron cuatro fusiles AK-103, y una pistola Beretta 9 milímetros, “asignados al personal militar perteneciente al 521 BIS G/J Rafael Urdaneta, a bordo de la mencionada aeronave. Los mismos se encuentran altamente deteriorados debido al siniestro y a las condiciones meteorológicas presentes en la zona”, armamento que quedó a la orden de la Dirección General de Contrainteligencia Militar (Dgcim).
La información publicada por @prensaFANB fueron retuits de la periodista Madelein García, del canal de noticias Telesur, único medio de comunicación utilizado por el Gobierno nacional para difundir su versión de los hechos que rodean este siniestro.
#Amazonas| 8 de los 13 cuerpos del helicóptero militar siniestrado el pasado 30D han sido trasladados a Puerto Ayacucho pic.twitter.com/bULdqujWCS
— Madelein Garcia (@madeleintlSUR) 6 de mayo de 2017
Vuelo desviado
Lo primero que llama la atención, según el gobernador de Amazonas, Liborio Guarulla, es el lugar en el que encontraron al “hércules”: las adyacencias del caño Yagua, a 50 millas náuticas (92,6 kilómetros) al noroeste de la base de La Esmeralda, el destino final original del helicóptero.
Caño Yagua se encuentra ubicado en el Parque Nacional Cerro Yapacana, en el municipio Atabapo de Amazonas. Según el comunicado, sólo se accede a él por vía aérea.
Lea también:Armando Armas: Altos funcionarios ocultan información del helicóptero desaparecido
“Eso no forma parte de la ruta del vuelo Puerto Ayacucho – La Esmeralda”, enfatizó Guarulla el mismo 2 de mayo. Posteriormente, en su cuenta de Twitter, el gobernador aseguró que “buscando minas qué bombardear se encontraron con el helicóptero”, y no en el vuelo 483 de la “Operación Esperanza”, como lo indica el boletín ministerial sobre la misión que, en teoría, encontró al aparato.
Guarulla no respondió a las llamadas de El Pitazo para conocer si, desde entonces, ha sabido más detalles de la búsqueda del helicóptero, cuyo hallazgo conoció al mismo tiempo que el resto del país, por el comunicado.
Buscando minas para bombardear se toparon con el helicóptero desaparecido hace 4 meses. No estaba en ruta a Esmeralda como muchos rumoraron
— Liborio Guarulla (@LiborioGuarulla) 3 de mayo de 2017
¿Dificultades?
En cuatro meses de búsqueda se emplearon “acciones fluviales, terrestres y aéreas, con el apoyo de las comunidades indígenas, las autoridades aeronáuticas (Inac y SAR) y los distintos medios con que cuenta la Fanb, así como los servicios de un avión dotado de equipos especiales para la detección por radar y escaneo multi-espectral, al igual que el soporte de imágenes satelitales provistas por países amigos”. Así lo precisa el texto oficial de hace cuatro días.
Desde el primer momento, el 2 de enero, fuentes militares indicaron a familiares que la aeronave no respondía a la búsqueda satelital, hecho que denota que el dispositivo GPS de la aeronave o fue apagado durante el vuelo o no estaba en funcionamiento.
Las “imágenes satelitales provistas por países amigos”, sugieren que el helicóptero fue buscado por otros radares, probablemente para tener razón de él fuera del territorio venezolano.
Sin embargo, el comunicado del Ministerio de Defensa apunta a que las operaciones de búsqueda “se vieron severamente afectadas por las condiciones meteorológicas adversas, las cuales persisten, y lo intrincado de la vegetación selvática de la zona”.
El Instituto Nacional de Meteorología e Hidrología (Inameh), en sus boletines de prensa, reseña que solo en enero hubo “cielo nublado general” en Amazonas, mientras que en los meses siguientes mejoró a “nubosidad dispersa”, “cielo poco nublado” en marzo, y “parcialmente nublado” en abril. En todos los meses hubo “precipitaciones débiles a moderadas”, con excepción de marzo.
Vale destacar que estas condiciones no interfieren con la búsqueda satelital, confirmaron rescatistas consultados por El Pitazo, pero sí con la búsqueda aérea.
La fuente resaltó que “cuando las aeronaves tienen alguna situación de emergencia o caen en la selva, deberían tener un ELT (Emergency Locator Transmitter), que con el impacto emite una señal de frecuencia y eso te da una ubicación de coordenadas” de dónde podría estar ubicado el aparato.
“Lo reglamentario es que tenga el ELT o radio impacto” que dé las señales para realizar la búsqueda. “Esto es un hecho aislado. Todavía no nos explicamos qué pudo haber pasado”, dijo el experto de Amazonas, quien prefirió no revelar su identidad por temor a represalias.
Por otra parte, según la Gran Enciclopedia de Venezuela (1998), en el parque nacional donde se encuentra el caño hay varias comunidades indígenas Piaroa y Yagua.
Sin embargo, lo que comunica el Ministerio de Defensa no involucra ninguna colaboración de estos asentamientos. Si se cayó el helicóptero ahí, ¿nadie avistó ni avisó nada? ¿Era la primera vez que recorrían esa zona, cercana de la base de La Esmeralda, en cuatro meses?
Familiares molestos
Vía redes sociales circuló el comunicado de Lilia Camejo, directora de Justicia Venezolana, quien junto a un grupo de familiares asegura tener información sobre el estado de los pasajeros y tripulantes. “Tenemos indicios y presunciones de que nuestros familiares están vivos, por lo que instamos a las autoridades competentes a que los entreguen inmediatamente”.
Aseveró que exigirán la investigación médico-científica pertinente, si eventualmente les entregaran o mostraran cadáveres de sus familiares, así como “la evidencia de la caja negra de la referida aeronave a los fines de que se determine la veracidad de los hechos”.
Expresaron su descontento con los precarios detalles del comunicado y del propio Vladimir Padrino López, quien ha declarado en vivo y en cadena nacional sobre asuntos como la Asamblea Nacional Constituyente que promueve el presidente Nicolás Maduro, pero ni una sola palabra sobre lo que ocurre en Amazonas.
Maduro se suma al silencio en torno al caso, pese a que el 2 de febrero los familiares de los 13 extraviados solicitaron públicamente una audiencia con él, para exigirle que supervisara lo que sucedía con el helicóptero. El presidente los sigue ignorando.
Comienza a despejarse el caso del extravío del helicóptero y sus 13 ocupantes (9 oficiales militares y cuatro civiles), entre ellos una niña indígena que cumplió 5 años este 2 de mayo, sobrina de Israel Martínez.
La opacidad sigue reinando en el caso sobre el que han girado todo tipo de rumores, sin que el Gobierno nacional refiera un boletín detallado de su búsqueda.
Martínez siempre ha denunciado los precarios reportes militares de la búsqueda, que se limitaron a “seguimos buscando”.
El comunicado del Ministerio de Defensa concluyó con que “la institución castrense continuará informando a la colectividad nacional de los avances correspondientes en todo lo concerniente al evento”. Se espera más información.