Caracas. Proviene de una familia humilde que reside en lo más alto del estado Mérida. Andre Alfonzo Paredes Soler, de 22 años, es considerado uno de los rostros más jóvenes entre los 24 militares que se sublevaron en el destacamento de Cotiza en contra del gobierno de Nicolás Maduro, el pasado 21 de enero.
Soler Márquez es su madre y refiere que ella y su hijo residen en la localidad de Pueblo Llano. Cuando se enteró que había ocurrido una rebelión en Caracas se asustó y encendió el televisor, pero tras la poca información del hecho empezó a llamar a amistades.
El militar proviene de una familia humilde. Es oriundo de Pueblo Llano, estado Mérida | Foto: Cortesía
«Yo nunca pensé que mi hijo estaría allí. El 22 de enero su esposa recibió una llamada, era él. Le dijo: «Dile a mi mamá que estoy bien que necesito que me traiga ropa y otros artículos personales». Soler explica que ella no supo cómo tomar la noticia y buscó la forma para viajar hacia Caracas, pero «estaba muy confundida. No sabía donde buscarlo».
LEE TAMBIÉN:
HUGO CARVAJAL RECONOCE A JUAN GUAIDÓ COMO PRESIDENTE DE VENEZUELA
Andre, es sargento segundo, se graduó en 2018 en el Liceo Militar General en Jefe Jose Antonio Paez, en Barinitas, estado Barinas. Hasta su detención trabajaba en Macarao, el único comando que conoció por estar tan nuevo en la fuerza armada.
Su madre lo pudo ver en la visita del pasado 17 de febrero, reconoce que lo observó más delgado y trató de desviarle las preguntas sobre la sublevación. «Yo sé que él no me quiere hacer sufrir. Lo único que me admitió es que estaba destacado en Macarao y luego apareció en Cotiza. Poco a poco, cuando lo liberen me contará qué pasó en realidad. Yo solo pido que no me lo torturen, mi niño es un jovencito. Es delgado, un angelito».
El sargento segundo fue imputado por los cargos de rebelión militar, traición a la patria, motín y sustracción de arma de fuego, al igual que los otro 23 funcionarios.
Fue imputado por los cargos de rebelión militar, traición a la patria, motín y sustracción de arma de fuego | Foto: cortesía
Desde el 22 de enero, su madre se ha encargado de su caso, pues el militar tiene un hijo de dos años que se encuentra bajo el cuidado de su esposa en Mérida. «A pesar de los pocos recursos que tengo, porque soy aseadora del Ministerio de Educación, me he valido de las ayudas que me dan amigos y familiares, porque con 18 mil bolívares al mes no alcanza ni para el viaje desde Mérida. Gracias a ellos he logrado estar en Caracas y estar pendiente de la situación de mi hijo, quien pronto saldrá en libertad, pues su único delito es querer un mejor país».
Miles de venezolanos en las zonas más desconectadas del país visitan El Pitazo para conseguir información indispensable en su día a día. Para ellos somos la única fuente de noticias verificadas y sin parcialidades políticas.
Sostener la operación de este medio de comunicación independiente es cada vez más caro y difícil. Por eso te pedimos que nos envíes un aporte para financiar nuestra labor: no cobramos por informar, pero apostamos porque los lectores vean el valor de nuestro trabajo y hagan una contribución económica que es cada vez más necesaria.
HAZ TU APORTE