Caracas.- Cada 18 de febrero se celebra el Día Internacional del Síndrome de Asperger. Una jornada no solo de celebración sino también de reivindicación en todo el mundo para que la sociedad ponga el foco en las personas con Asperger y otros trastornos de espectro autista (TEA) de alto funcionamiento.
¿Porqué se le llama síndrome de Asperger?
En el año 1944, un pediatra austriaco, llamado Hans Asperger, observó a cuatro niños en su práctica que tenían dificultad para integrarse socialmente. Aunque su inteligencia parecía ser normal, los niños carecían de habilidades no verbales de comunicación, no podían demostrar empatía por los demás y eran torpes físicamente.
Su forma de hablar era inconexa o demasiado formal, y el interés absorbente en un solo tema dominaba sus conversaciones.
LEE TAMBIÉN
john dalton: el primer químico que estudió y descubrió el daltonismo
Las observaciones de Asperger, publicadas en alemán, no se conocieron ampliamente hasta 1981, cuando la médico inglesa Lorna Wing publicó una serie de estudios de casos de niños que mostraban síntomas similares, lo que llamó Síndrome de “Asperger”.
¿Cómo se comunica una persona con Síndrome de Asperger?
Puede hablar durante mucho tiempo de sus temas de interés, pero tiene dificultad para saber cuándo terminar la conversación.
Es muy literal. Comprende el lenguaje según el significado exacto de las palabras, por lo que muchas veces no entiende las bromas, los chistes, las metáforas o los sarcasmos.
Su expresión verbal es correcta pero, a veces, utiliza el lenguaje de manera muy formal, siendo demasiado preciso, técnico e incluso pedante.
LEE TAMBIÉN
¿Cómo se relaciona una persona con Síndrome de Asperger?
Quiere relacionarse con los demás, pero no sabe cómo hacerlo por lo que, a veces, puede encontrarse solo.
Le resulta muy difícil manejarse en situaciones en las que tiene que interactuar con muchas personas a la vez, lo que puede parecer que no quiere relacionarse o integrarse en el grupo.
Encuentra difícil expresar sus propias emociones de una manera convencional por lo que, a veces, puede parecer que reaccionan de manera inadecuada, desproporcionada o “fuera de lugar”.
¿Cómo piensa y se comporta una persona con Síndrome de Asperger?
Su forma de pensar es rígida y concreta, lo que le ayuda en actividades que requieren atención a detalles y repetición de patrones, pero tiene dificultades en tareas que requieren flexibilidad o búsqueda de alternativas para la resolución de problemas.
Las rutinas le proporcionan seguridad y pautas concretas de actuación, pero limitan su comportamiento dificultando la adaptación a cambios, situaciones novedosas o poco previsibles.
Puede ser extremadamente sensible a algunos estímulos del ambiente, resultándole molestos o dolorosos (ruidos, luces, olores, sabores, entre otros).
¿Cómo puedes ayudar a una persona con Síndrome de Asperger?
Reflexiona sobre los desafíos sociales que afrontas todos los días e intenta ponerte en el lugar de una persona que genuinamente no los comprende ni sabe cómo afrontarlos.
Trata de empatizar con su experiencia y procura comprenderla, aunque a veces sea muy distinta a lo “convencional”.
Comprende la importancia de sus rutinas y “rigideces”. Son elementos importantes que le proporcionan seguridad. Puedes ayudar a flexibilizarlas sin imponer tu manera de ver las cosas. Pregúntale cuál es la mejor manera de apoyarle.
Información recabada de www.autismo.org