Caracas.- El confinamiento para detener la propagación del nuevo coronavirus no tiene fecha de finalización. Para la Organización Mundial de la Salud (OMS), la cuarentena es el único método efectivo para evitar una expansión masiva del virus. Luego de más de tres meses, las posibilidades de moderar los estrictos controles sanitarios representan un alto riesgo de aumento de casos, aun en países que parecen haber superado el nivel más alto de contagios.
María Van Kerkhove, vocera del Programa de Emergencia de Salud de la OMS, invitó a la población a mentalizarse sobre la posibilidad de que esta fase de contención se mantenga por tiempo indefinido. La indisponibilidad de una vacuna o tratamiento universal impiden que se pueda tener un control eficaz del número de afectados. Por esto, el temor de que los servicios de salud colapsen se mantiene igual que al inicio de la epidemia.
«Necesitamos tener la mentalidad de que tomará algún tiempo salir de esta pandemia y levantar las restricciones de una manera lenta y escalonada. Todos debemos comprender que es posible que sea necesario implementarlos nuevamente. Hay un largo, largo camino por recorrer antes de que dejen de sonar las campanas de alarma. Los países están tratando de encontrar un camino, un camino hacia una nueva normalidad. Vamos a estar en ese camino por mucho tiempo», reflexionó Van Kerkhove.
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Para la epidemióloga, todo método para abordar la pandemia está en revisión continua. Así lo expresó al ser cuestionada sobre la efectividad del aislamiento, respecto de Perú y Rusia, países con métodos de control diferentes, en los que, pese a la generalización progresiva de la cuarentena, se ha reportado un alza en los casos confirmados. Insistió en que ambos casos se revisarán para conocer su experiencia.
Pensamiento mágico
Mike Ryan, director ejecutivo de la OMS, refrendó esta posición institucional. El funcionario dejó entrever su crítica a los protocolos de desconfinamiento que han sido aprobados en países como España y México. En ambas naciones se estableció un procedimiento por fases basado en la disminución de la estadística de infectados. Reiteró que la cuarentena no elimina la posibilidad de propagación por sí misma. El protocolo de la OMS recomienda el despistaje masivo para la identificación de los casos y una exhaustiva investigación epidemiológica, que muchos países omiten al solo aplicar pruebas rápidas.
«Hay un pensamiento mágico de que los confinamientos funcionan perfectamente y que levantar las restricciones va a ir genial. Los países están viendo si el riesgo en otro país es el mismo y se maneja de la misma manera. Si es así no hay tanto riesgo en mover ciudadanos. Es lo que llaman zonas ‘burbuja'», indicó.
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Tedros Adhanom Ghebreyesus, director general de la OMS, expuso que los efectos del coronavirus se verán por mucho tiempo después de superada la pandemia. Reveló que, según cálculos de la institución, el mundo experimentará un retroceso en cuanto a los logros de salud pública alcanzados en las últimas décadas. Esto se evidenciaría en un descenso de indicadores, entre los que destacan la mortalidad infantil y la esperanza de vida.
«El COVID-19 se está cobrando numerosas vidas y amenaza con revertir los progresos que hemos hecho durante décadas. La mejor defensa contra los brotes de enfermedades es la preparación, que incluye invertir en la construcción de sistemas de salud sólidos y atención primaria de salud. Si no lo hacemos, enfrentaremos no solo las consecuencias para la salud, sino también las consecuencias sociales, económicas y políticas», subrayó.