Un estudio del Centro Johns Hopkins para la Salud Humanitaria sobre la crisis de salud en Venezuela evidencia el deterioro de la atención médica en el país: con un aumento en la mortalidad materna e infantil.
La investigación, con el apoyo de la Fundación Simón Bolívar y publicada el 22 de marzo, reseñó cómo la crisis política y económica de Venezuela ha paralizado los sistemas de salud, además de qué se puede hacer para recuperarlos.
Entre los hallazgos del estudio destaca un incremento de 5% en la mortalidad materna y de 63,6% en niños en 2016 en comparación con 2012.
Las organizaciones denunciaron que más de 70% de los hospitales públicos venezolanos no tienen acceso regular a servicios de agua o electricidad; ni programas de trasplantes desde 2014.
“La cobertura de vacunación en Venezuela está muy por debajo del promedio regional, con un resurgimiento de muchas enfermedades prevenibles por vacunación, en particular el sarampión”, se lee en una nota de prensa de Hum Venezuela.
Además se reportó un 90% de la población en pobreza, 32% de los niños con desnutrición crónica y uno de cada tres adultos con inseguridad alimentaria.
“Hay 14,3 millones de personas en Venezuela que necesitan asistencia humanitaria. El plan de respuesta humanitaria de 2020 requirió $763 millones en ayuda, pero en agosto de 2020 solo se habían proporcionado $130 millones en asistencia”, añadió el informe.