A pesar de que el cáncer de cuello uterino se puede prevenir, es el tercer causante de mortalidad oncológica femenina en el país, con una cifra calculada de 2.037 fallecimientos y 5.707 casos nuevos para finales de 2023. La Sociedad Anticancerosa de Venezuela advirtió que la falta de diagnósticos a tiempo incrementa los índices de incidencia
A los 26 años, una mujer no piensa que un diagnóstico de cáncer llegue a su vida, ni que la palabra muerte le pase por la cabeza. Pero esta enfermedad, que se aloja en el cuerpo de manera silenciosa, también puede evitarse cuando la revisión médica es regular y se atienden las señales que manda el cuerpo.
Esto le pasó a la joven Jermalieth Peñalver, a quien le diagnosticaron cáncer de cuello uterino en septiembre de 2024. La detección tardía le generó consecuencias.
En octubre de 2023 recibió un primer diagnóstico. Lo que se creía era una infección vaginal, terminó siendo un cáncer que no se detectó a tiempo. Las alarmas se encendieron en Jermalieth cuando notó cambios en su cuerpo y ciclo menstrual, por lo que decidió buscar otra opinión médica.
Actualmente, 7 de cada 10 personas en el mundo están infectadas con VPH y eso influye en la posibilidad de tener más casos de cáncer de cuello uterino
Jorge Mera Ceballos, ginecobstetra
Luego de casi un año presentando sangrado abundante y dolor durante las relaciones sexuales, en septiembre de 2024 acudió a un especialista, quien le detectó cáncer de cuello uterino en estadio II, es decir, su tumor mide 5 centímetros y una colposcopia, examen que no se hizo anteriormente, ayudó a detectar rápidamente la lesión.
Para el ginecobstetra y miembro de la Sociedad Anticancerosa de Venezuela (SAV), Jorge Mera Cevallos, es importante la visita anual al especialista, pero enfatizó que no es solo realizarse una citología, sino también la colposcopia, que es el estudio médico que permite visualizar a fondo si hay una lesión por Virus del Papiloma Humano (VPH).
En entrevista con El Pitazo, explicó que hay casos de pacientes con cáncer de cuello uterino que no han tenido una infección previa por VPH, pero en 95 % de los casos sí han presentado o aún tienen la enfermedad.
En la actualidad, 7 de cada 10 personas en el mundo están infectadas con VPH y eso también puede influir en la posibilidad de tener más casos de cáncer de cuello uterino, de acuerdo con el especialista en ginecología. Se estima que hasta 80 % de la población sexualmente activa, hombres y mujeres, podrán tener contacto con el virus en algún momento de sus vidas.
Si no se toman medidas, el cáncer de cuello uterino pudiese llegar a ocupar el primer lugar de decesos femeninos
Yrama Baloa, especialista en ginecología
Si bien, lo más habitual es que la infección sea transitoria y se resuelva de forma espontánea en los dos años siguientes a su adquisición sin producir ningún tipo de síntoma, hay entre 10 y 15 % de la población en los que la infección por VPH no desaparece y persiste en el tiempo.
Otra de las razones que influye en el diagnóstico de cáncer de cuello uterino en mujeres jóvenes es el inicio temprano de relaciones sexuales y el número de parejas.
«Si una persona comienza las relaciones sexuales a los 12 años, dan los tiempos para que una infección pueda convertirse en una lesión de alto grado debido a que no ha sido tratada», comentó el especialista Jorge Mera Cevallos.
No descuidar la visita al ginecólogo
En el caso de Jermalieth Peñalver, ella no abandonó sus visitas al ginecólogo. Iba cada año, incluso cada seis meses. Pero asegura que uno de sus últimos chequeos médicos no se hizo de manera correcta.
Mera Cevallos precisó que son pocos los casos de pacientes que acuden a su control ginecológico y de manera regular. En su mayoría, las mujeres descuidan las visitas periódicas al especialista y eso influye en el incremento de diagnósticos de cáncer de cuello uterino en jóvenes.
Muerte fue la primera palabra que llegó a mi mente cuando me diagnosticaron cáncer, pero decidí luchar
Jermalieth Peñalver, paciente de 26 años
En ese sentido, recomendó a toda la población femenina visitar al ginecólogo cada año y estar atenta a cualquier cambio en el cuerpo o ciclo menstrual. «Las mujeres se conocen y si ven algo extraño deben acudir al especialista, no esperar a ver si les vuelve a pasar», agregó.
En marzo de 2024, la Sociedad Anticancerosa de Venezuela advirtió que la falta de diagnósticos a tiempo incrementa los índices de incidencia y mortalidad por enfermedades oncológicas en mujeres venezolanas, pero en los últimos años también se evidencia que los diferentes tipos de cáncer afectan cada vez más a las jóvenes.
El gerente general de la Sociedad Anticancerosa, Juan Saavedra, indicó que debido al impacto de las enfermedades oncológicas en la calidad de vida de la mujer venezolana, es necesario fomentar la conciencia sobre la prevención, el autocuidado y el tratamiento oportuno, incluso desde temprana edad.
Las mujeres se conocen y si ven algo extraño deben acudir al especialista, no esperar a ver si les vuelve a pasar
Jorge Mera Ceballos, ginecobstetra
Cifras alarmantes
La especialista en ginecología y gerente de las Unidades de Clínicas Móviles (UCM) de la Sociedad Anticancerosa, Yrama Baloa, explicó que, a pesar de que el cáncer de cuello uterino se puede prevenir, es el tercer causante de la mortalidad oncológica femenina en el país, con una cifra calculada de 2.037 fallecimientos y 5.707 casos nuevos para finales de 2023. Asimismo, dijo que si no se toman medidas, pudiese llegar a ocupar el primer lugar de decesos femeninos por cáncer.
Comentó que, para septiembre de 2023, 48 % de las pacientes pesquisadas en las UCM tenían lesiones premalignas de los genotipos de VPH de alto riesgo, específicamente los 16 y 18, que son genotipos de la enfermedad, lo cual significa que estas mujeres tienen una mayor posibilidad de desarrollar cáncer de cuello uterino a mediano o largo plazos.
«Se puede reducir considerablemente la incidencia y mortalidad de las mujeres venezolanas por cáncer de cuello uterino con la implementación de la vacuna contra el VPH y el control de los factores de riesgo”, precisó Baloa.
Entre esos factores se incluyen: multiplicidad de parejas sexuales, falta de uso de protección en la actividad sexual, fumar, estrés y alimentación inadecuada. Asimismo, insistió en vacunar contra el VPH a las niñas y adultas, sin embargo, en Venezuela no se administra esta inyección de manera gratuita, sino que los precios pueden llegar a 200 dólares.
Se puede reducir considerablemente la incidencia y mortalidad por cáncer de cuello uterino si se vacuna contra el VPH
Yrama Baloa, especialista en ginecología
Los especialistas resaltan la necesidad de alertar sobre el VPH y sus riesgos a temprana edad, si es que las mujeres empiezan su actividad sexual de forma precoz en la infancia y adolescencia, pues influye en el hecho de que esta enfermedad oncológica se presente en edades más tempranas.
Existen casos de pacientes diagnosticadas con cáncer de cuello uterino a los 20 años, aunque la afección aparece principalmente entre los 35 y 44, según cifras de la Sociedad Anticancerosa.
Luchar contra la enfermedad
Cuando Jermalieth Peñalver recibió su diagnóstico, decidió luchar contra la enfermedad y hacer todo lo que está a su alcance para salir adelante por ella y por su hija de cinco años.
En medio de las dificultades para acceder a los servicios de salud públicos en Venezuela y los pocos recursos económicos con los que cuenta, esta joven de 26 años se vio en la necesidad de hacer rifas y recurrir a la ayuda de familiares y amigos para costear tratamientos y exámenes médicos.
No hay que tener miedo ni pena a los diagnósticos. Enfrentar esta enfermedad es una lección de vida
Jermalieth Peñalver, paciente de 26 años
Peñalver tenía la esperanza de una intervención quirúrgica para eliminar el tumor, pero los resultados médicos arrojaron que su cuello uterino mide 4 centímetros, mientras que el tumor tiene un tamaño de 6 centímetros, por lo que no hay posibilidades de hacer cirugía. Ahora solo debe recibir quimioterapia y radioterapia.
En medio de las dificultades y las pruebas que se le ponen en el camino, le envió un mensaje a todas las mujeres con cáncer y a quienes aún no se atreven a visitar al especialista. Les recomendó no tener miedo ni pena a los diagnósticos y aseguró que enfrentar esta enfermedad es una lección de vida.