20 trabajadores de la prensa detenidos, 12 de ellos por el ejercicio de su profesión, 465 medios cerrados y 300 periodistas exiliados ensombrecen la celebración del Día del Periodista en Venezuela este 27 de junio. Sin embargo, los profesionales de la comunicación son optimistas y confían en que vendrán tiempos mejores
Una de las frases célebres del novelista y periodista George Orwell expresa que el «periodismo es publicar lo que alguien no quiere que publiques, todo lo demás son relaciones públicas». El enunciado refleja lo que para este crítico británico significa ejercer esta profesión; sin embargo, en Venezuela es un riesgo decir lo que resulta incómodo para quienes gobiernan el país.
Una muestra son las detenciones de profesionales como Ramón Centeno; Luis López; Gabriel González; Salvador Cubillán; Julio César Balza; Leandro Palmar; Rory Branyer; Nakary Ramos; Juan Alvarado; Gianni González; Ángel Godoy y Carlos Marcano por el ejercicio de su profesión, según registro del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Prensa (SNTP).
La lista es aún más larga. También hay periodistas arrestados por expresar sus opiniones o ejercer un activismo públicamente, como son los casos de José Camero; Carlos Julio Rojas; Víctor Ugas; Biagio Pilieri; Roland Carreño; Juan Pablo Guanipa; Pedro Guanipa y Mario Chávez. Algunos permanecen aislados, sin acceso a la salud ni al debido proceso.

Estas aprehensiones generan un sabor amargo este 27 de junio cuando se celebra el Día del Periodista en Venezuela. Se trata de una fecha que reconoce la labor de quienes tienen la misión de informar; pero, en esta ocasión, se verá ensombrecida por la represión hacia los comunicadores sociales, que se traduce en un ataque directo contra la libertad de expresión.
«La situación para la prensa independiente en Venezuela continúa deteriorándose, y son especialmente preocupantes las detenciones arbitrarias que se efectuaron durante los meses de julio y agosto de 2024, así como en los primeros meses de 2025», señaló el Instituto Prensa y Sociedad (Ipys) de Venezuela en un comunicado publicado en su sitio web, el 23 de junio.
Para la organización no gubernamental estos arrestos «forman parte de una tendencia creciente de represión y hostigamiento» en el país y «un intento de acallar las voces que buscan denunciar las injusticias y abusos de poder».
¿Escribimos en un país libre?
El Día del Periodista se festeja el mismo día que se imprimió el primer ejemplar del periódico Correo del Orinoco, en 1818.
Fundado por el libertador Simón Bolívar, este medio se convirtió en la voz de la libertad, desde su nacimiento.
En el primer enunciado de aquella publicación, Bolívar describió el principio de esta profesión: «Somos libres, escribimos en un país libre y no nos proponemos engañar al público».
Este manifiesto no se cumplió con las detenciones de la periodista Nakary Mena Ramos y de su esposo y asistente de cámara, Gianni González, el 8 de abril de 2025, luego de publicar un reportaje sobre el presunto aumento de robos en Caracas.
Días antes el ministro de Interior, Justicia y Paz, Diosdado Cabello, había anunciado una «investigación profunda» sobre la difusión de reportes en redes sociales que denunciaban la inseguridad en la capital venezolana.
En la audiencia de presentación, Mena Ramos fue acusada de «instigación al odio» y «denuncias falsas». Por decisión del Tribunal 1ero de Control del Área Metropolitana de Caracas pasó juicio en prisión.


Fue indignante y humillante que me pusieran esposas cuando me llevaban al hospital, porque yo no soy una delincuente. También me afectó estar separada de mis hijos y que ellos vivieran bajo la mentira de que estaba de viaje para evitarles este trauma
Deisy Peña, fotógrafa
Esa decisión le impide estar al lado de su hija de 5 años. Además, la periodista fue operada de la columna por una escoliosis, antes de ser arrestada, y ahora está durmiendo en una colchoneta en su sitio de reclusión. Esta incomodidad le está generando un intenso dolor lumbar.
«Tiene tornillos, barras de titanio y le duele la espalda», aseguró la madre de Mena Ramos en declaraciones ofrecidas a la ONG Espacio Público.
Para el Instituto Prensa y Sociedad (Ipys) de Venezuela la detención de Mena Ramos y su esposo es una «grave violación de la libertad de expresión y del derecho al ejercicio del periodismo».
El secretario general del Colegio Nacional de Periodista (CNP) Caracas, Edgar Cárdenas comulga con esta opinión. «Este caso comprueba el exceso cometido por las altas esferas gubernamentales en materia de libertad de expresión», afirma.
Cárdenas mencionó que en el caso de los periodistas detenidos se aplica más la excepción que la regla, al dejarlos presos, tras la audiencia preliminar, en vez de concederles ir a un juicio en libertad, como lo permite la ley.
«Son juicios de larga duración, como los casos de Ramón Centeno, quien lleva 3 años detenido y 80 suspensiones de audiencia; Carlos Rojas y Luis López. Esto no es más que un mensaje que se está enviando a los periodistas y a los medios: la agenda no la deben dictar los medios, producto de la jerarquización de la noticia, sino que es impuesta por las altas esferas del poder», indicó.
«No soy una delincuente»
Deisy Peña, jefa de fotografía de la alcaldía del municipio Carrizal del estado Miranda, fue arrestada el 2 de agosto de 2024 en la ciudad de Los Teques y excarcelada el 11 de diciembre del mismo año, con medidas cautelares.
La profesional fue acusada de terrorismo, incitación al odio y obstrucción de la vía pública por cubrir las protestas que ocurrieron en Venezuela después de la elección presidencial del 28 de julio y publicar las fotografías en su estado de WhatsApp. De todos los cargos se declaró inocente.
Los cuatro meses y medio que estuvo detenida, en la sede de la Policía del estado Miranda en Ocumare del Tuy, enfrentó momentos difíciles. Los más rudos: cada vez que la esposaban y estar lejos de sus hijos.
«Fue indignante y humillante que me pusieran esposas cuando me llevaban al hospital, porque yo no soy una delincuente. También me afectó estar separada de mis hijos y que ellos vivieran bajo la mentira de que estaba de viaje para evitarles este trauma», indicó a El Pitazo, el 25 de junio.


Ejercer el periodismo libre en Venezuela es un peligro. Si no huyo, hoy estaría preso como lo están arbitrariamente tantos colegas
Jean Carlos Rodríguez, periodista
Aunque Peña continúa ejerciendo su trabajo a nivel institucional, la labor que desempeña en un medio de comunicación independiente se ha visto limitada. La profesional no puede ir a protestas ni asistir a actos políticos. Su proceso sigue abierto.
«Hay 12 comunicadores sociales sometidos a judicialización, aunque fueron excarcelados, tienen régimen de presentación y procesos judiciales abiertos, en el marco de la impunidad. No hay un solo caso que haya sido investigado y que se hayan ejercido acciones ejemplarizantes que evidencien que sí puede tener un costo el hecho de violentar el derecho de los periodistas en el ejercicio de sus funciones», alertó el secretario general del SNTP.
465 medios cerrados y 300 periodistas exiliados
En las últimas dos décadas, al menos 465 medios de comunicación han cerrado en Venezuela, según la cifra que maneja el Colegio Nacional de Periodistas (CNP), mientras que al menos 300 periodistas venezolanos se vieron forzados al exilio hasta 2024.
Un informe presentado por Reporteros Sin Fronteras (RSF) y siete organizaciones colaboradoras, en noviembre de 2024, documentó 228 violaciones a la libertad de prensa entre el 1 de julio y el 28 de agosto de ese año, a propósito de la elección presidencial, celebrada el 28 de julio.
La investigación, titulada «Restricciones a la libertad de prensa y asfixia mediática en el contexto electoral en Venezuela», recoge 62 agresiones físicas y verbales contra la prensa; 11 periodistas extranjeros detenidos arbitrariamente y expulsados; el bloqueo de al menos 29 sitios web de medios de comunicación y organizaciones de prensa y 45 casos de discursos estigmatizadores contra la prensa. Para ese momento, RSF contabilizó que al menos 8 periodistas continuaban encarcelados arbitrariamente.
«La prensa venezolana vive bajo el miedo y el riesgo constantes. El gobierno de Nicolás Maduro ha aislado intencionadamente al país, silenciando duramente a los periodistas locales y expulsando o restringiendo el acceso a los profesionales de los medios extranjeros», señaló Artur Romeu, director de la Oficina para América Latina de RSF.
De acuerdo con la Clasificación Mundial de Libertad de Prensa 2025, difundida el 2 de mayo de 2025 por la organización Reporteros Sin Fronteras (RSF), Venezuela ocupó el puesto 160 y bajó cuatro puestos con respecto a 2024, cuando se ubicó en el puesto 156. El país se sitúa en el antepenúltimo lugar en América Latina, solo por encima de Cuba (165) y Nicaragua (172).
«Si no huyo, hoy estaría preso»
Jean Carlos Rodríguez es uno de los periodistas venezolanos exiliados. En conversación con El Pitazo aseguró que se vio obligado a irse del país, porque se sintió perseguido y amenazado.
Una citación del Cuerpo de Investigaciones Científicas, Penales y Criminalísticas (Cicpc), después de denunciar un presunto tráfico de material estratégico por parte de directivos de este organismo, puso en alerta al comunicador social, oriundo del estado Miranda.
«Ejercer el periodismo libre en Venezuela es un peligro. Si no huyo, hoy estaría preso como lo están arbitrariamente tantos colegas», afirmó a El Pitazo el 25 de junio.
En opinión de Rodríguez estas detenciones son una política de Estado para silenciar a los periodistas y reprimir la libertad de expresión.
«En Venezuela se redujo el periodismo independiente. Solo algunos medios digitales se mantienen como una alternativa debido a la censura que ejerce el gobierno», remarcó.


Hoy se ha criminalizado el ejercicio del periodismo, a pesar de que el derecho a la información y la libertad de prensa, entre otros, están consagrados en la Constitución
Delvalle Canelón, secretaria general del CNP
La secretaria general del Colegio Nacional de Periodistas (CNP), Delvalle Canelón, también admite que hoy en día es muy riesgoso ejercer el periodismo libre en Venezuela, «porque cuando hay crítica o disidencia estás vetado».
«Hoy se ha criminalizado el ejercicio del periodismo, a pesar de que el derecho a la información y la libertad de prensa, entre otros, están consagrados en la Constitución», remarcó a El Pitazo el 24 de junio.
Marco Ruiz comparte esta opinión y recordó que hace 10 o 15 años se pensaba que la situación para los periodistas no podía estar peor con relación a la ausencia de garantías para el ejercicio de la profesión, «pero la realidad es que con los años ha venido empeorando, con nuevos patrones de persecución hacia el periodismo crítico, el que cuenta la verdad, indistintamente de quien pueda terminar afectado».
En medio de este contexto, Canelón y Ruiz reconocen que la censura y la autocensura han ganado espacio. «Primero la impuesta desde el sector gubernamental; posteriormente desde los medios, debido a las diferentes presiones, y después la autocensura para mantener el trabajo o por miedo a ser detenido», detalla Canelón.
En este punto, Ruiz agrega que esta censura y autocensura se acrecentaron después del mes de julio de 2024 «cuando vimos la ola represiva más grande y significativa contra periodistas y medios».
«El ejercicio profesional quedó prácticamente desarticulado. Hubo un golpe de estado comunicacional que ha silenciado de distinta forma al nuevo ecosistema de medios que surgió como una alternativa frente a la coacción contra los medios tradicionales por parte del Estado», acotó Ruiz.
En su opinión hoy existe mucho miedo frente a la imposibilidad de garantizar la seguridad de los trabajadores de la prensa y la de sus familiares. «Hubo regiones donde los periodistas, durante meses, no quisieron salir a la calle a trabajar por temor a la detención y a la persecución», añadió.
El mejor oficio del mundo
A pesar del obligado silencio informativo, Delvalle Canelón destaca que hay medios que siguen poniendo su granito de arena para mantener a Venezuela informada, aun cuando los problemas de acceso a Internet, las fallas de luz y el tema económico limitan su alcance.
La comunicadora social confía en que vendrán tiempos mejores. «La democracia y la libertad se impondrán en el país como lo establece la Constitución Nacional», afirma con esperanza.
Marco Ruiz también es optimista. El dirigente gremial considera que en la medida en que el periodismo resista hay futuro y está viva la posibilidad de seguir soñando con una Venezuela distinta.


El ejercicio profesional quedó prácticamente desarticulado. Hubo un golpe de estado comunicacional que ha silenciado de distinta forma al nuevo ecosistema de medios que surgió como una alternativa frente a la coacción contra los medios tradicionales por parte del Estado
Marco Ruiz, secretario general del SNTP
«La importancia del periodismo es innegable, sobre todo, en un contexto como el venezolano donde la percusión, el hostigamiento y la represión también han tocado al país, con sucesivas violaciones de derechos humanos, comunidades silenciadas, grupos organizados perseguidos. Y es precisamente en ese contexto donde el periodista, con ética, acuciosidad y responsabilidad, tiene el compromiso de seguir contando estas historias, mitigando los riesgos e incorporando medidas de seguridad», subrayó Ruiz.
Para Ruiz ese valor que tiene la profesión y el hecho de que aún sigan periodistas haciendo lo que les apasiona, es motivo para celebrar este 27 de junio.Ese mismo amor por la profesión mantiene viva la esperanza de Jean Carlos Rodríguez de regresar a su país y ejercer su carrera. Rodríguez, al igual que el famoso escritor Gabriel García Márquez, considera que el periodismo «es el mejor oficio del mundo».