Guanare.- Cinco adolescentes apresados en el estado Portuguesa, tras las protestas poselectorales del 29 de julio, fueron acusados formalmente por el Ministerio Público de cometer delitos de terrorismo, incitación al odio, incendio de estructura, obstrucción de vía y lesiones personales a funcionario.
La información la dio a conocer en Guanare la familia de uno de los menores. La madre de uno de los adolescentes, de 17 años, precisó que la acusación formal contra los menores ocurrió el miércoles 23 de octubre en Caracas, cuando se celebró la audiencia preliminar.
En esa audiencia, el Tribunal Segundo contra Delitos de Terrorismo en Materia de Responsabilidad Penal de Adolescente, del Área Metropolitana de Caracas, ordenó el pase a juicio de los cinco menores. El proceso se seguirá por causas individuales y no colectiva.
Para el acto judicial, los menores y sus representantes tuvieron que costearse el traslado vía terrestre desde Acarigua-Araure y Guanare hasta la capital de la República, aseguró la mujer. El proceso continuará en Caracas, a donde los adolescentes deberán viajar para enfrentar el juicio.
Los adolescentes —cuatro de Acarigua Araure y uno de Guanare— fueron excarcelados el pasado 31 de agosto, cuando se hizo una revisión de medida de privación de libertad y se les cambió por régimen de presentación periódica cada ocho días, de acuerdo con la petición de la Fiscalía 5 de Caracas.
De ellos, 4 estaban recluidos en el Centro de Diagnóstico y Tratamiento Integral (CDT) del sector La Corteza, ubicado en la zona sur de Acarigua. El quinto, de 16 años, se encontraba privado de libertad en la sede del Destacamento 311 de la Guardia Nacional, en Guanare.
A estos menores, con edades entre 15 y 17 años, les realizaron las audiencias de presentación individualmente, de forma telemática, ante el mismo tribunal contra el terrorismo.
En el caso del adolescente detenido en Guanare, se confirmó que cuando lo arrestaron tenía 16 años. El 27 de agosto cumplió 17 años estando privado de libertad.
Al adolescente detenido en Guanare lo relacionaron con el grupo de manifestantes que, el 29 de julio, derribó la estatua del Indio Coromoto. Mientras, a los arrestados en Acarigua-Araure los vinculan con la protesta en el Batallón Vuelvan Caras y en otras zonas de estas ciudades.
Familiares y organizaciones civiles y de defensa de los derechos humanos rechazan estas detenciones y los procesos a los que están sometidos estos adolescentes y los más de 1.800 presos políticos de todo el país, la mayoría recluidos en cárceles de alta peligrosidad, como Tocuyito (Carabobo), Tocorón (Aragua) y Yare II (Miranda), relataron medios de prensa.
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