18.4 C
Caracas
viernes, 6 diciembre, 2024

Madre de preso político Jesús Martínez: “Mi hijo prefería morir que regresar al infierno que vivió en la cárcel”

Desde el 11 de octubre, María Medina estuvo al pie de la cama donde se encontraba su hijo, Jesús Manuel Martínez Medina (48 años), en el hospital Luis Razetti de Barcelona, estado Anzoátegui. El hombre, quien fue testigo electoral en la elección presidencial del #28Jul, murió la mañana de este jueves 14 bajo custodia del Estado venezolano. Su mamá está convencida de que falleció por no recibir atención médica oportuna. Era diabético y se infectó en un calabozo policial

-

María Medina está desconsolada. Desde el 11 de octubre estuvo al lado de su hijo Jesús Manuel Martínez Medina (48 años) y fue testigo de cómo su vida se apagó lentamente. La mañana de este 14 de noviembre presenció su último suspiro en el Hospital Universitario Luis Razetti de Barcelona, estado Anzoátegui. Allí estaba recluido bajo custodia policial después de ser detenido en el contexto de las protestas postelectorales, el 29 de julio.

Medina está convencida de que su hijo murió por falta de atención médica oportuna. Entre lágrimas contó a El Pitazo, vía telefónica, las diligencias que realizó para que le concedieran un permiso para curarle una pierna que se le infectó en los calabozos de la Comandancia General de la Policía del estado Anzoátegui, en la sede del Crucero de Lechería, pero ningún organismo la escuchó.

En un primer momento, Medina se contagió de sarna; luego le salieron abscesos en la piel, hasta que se le contaminó la pierna dentro del calabozo. Su madre acudió a la fiscalía del Ministerio Público, a los tribunales y a la Defensoría del Pueblo pidiendo ayuda, pero sus esfuerzos fueron en vano.

Anzoátegui | Muere preso político Jesús Martínez: tenía diabetes tipo II y un problema cardíaco

“El viernes 11 de octubre un policía me llamó para comunicarme que mi hijo había sido trasladado de emergencia al hospital Luis Razetti. Me dijo que fuera al hospital al día siguiente, pero llegué esa misma noche. No podía esperar, estaba angustiada. Desde ese momento, nunca más me separé de él”, afirmó María Medina.

Durante el tiempo que estuvo a su lado, Jesús Manuel Martínez Medina le contó a su mamá los duros momentos que pasó tras las rejas. “Mi hijo me dijo que prefería morir antes que regresar al infierno que vivió en la cárcel. Nunca había estado preso. No se metía en problemas, no estaba acostumbrado a esas cosas”, señaló Medina a El Pitazo.

Dieta y tratamiento

Jesús Manuel Martínez Medina fue diagnosticado con diabetes a los 25 años; también tenía problemas cardíacos. Desde que le detectaron la enfermedad estuvo en tratamiento médico y cumplía una rigurosa dieta.

Su madre sabía lo delicado que son las infecciones cutáneas en pacientes diabéticos. Por ello insistió tanto en que le permitieran curarlo “y no lo dejaran morir”. Ese cuadro clínico era del conocimiento de las autoridades gubernamentales.

Organizaciones no gubernamentales (ONG), el abogado y exfiscal del Ministerio Público Zair Mundaray y la Plataforma Unitaria Democrática habían alertado del peligro que corría la vida de Medina.

Negar atención médica oportuna es una clara violación a los Derechos Humanos y conlleva responsabilidad individual para quien debe brindarla”, denunció la coalición opositora el 10 de noviembre.

Era obrero jubilado

A Martínez Medina lo llamaban cariñosamente “Manolín”. Era obrero jubilado de la Universidad Simón Rodríguez y tenía un taller en su casa, donde arreglaba electrodomésticos y cantaba música llanera. Tras separarse de su compañera sentimental, se quedó a cargo de su hija de 11 años, cursante del sexto grado.

Hermana de preso político Isaac Quevedo: «Ha convulsionado dos veces y no le suministran medicamentos»

“La noche antes de las elecciones, él llevó a la niña a la casa de su mamá para que la cuidara hasta que comenzaran las clases”, recordó María Medina. Al día siguiente, Martínez Medina trabajó como testigo de mesa en la escuela Guzmán Bastardo del estado Anzoátegui, y 24 horas después fue detenido.

Durante el tiempo de hospitalización, su hija lo visitó en una oportunidad. Ese día se encargó de darle la comida a su papá. Martínez Medina era zurdo y no tenía tanta destreza con su mano derecha. En la izquierda, al igual que en su pierna, se le había alojado una bacteria y no tenía movilidad.

TAMBIÉN TE PUEDE INTERESAR


Miles de venezolanos en las zonas más desconectadas del país visitan El Pitazo para conseguir información indispensable en su día a día. Para ellos somos la única fuente de noticias verificadas y sin parcialidades políticas.

Sostener la operación de este medio de comunicación independiente es cada vez más caro y difícil. Por eso te pedimos que nos envíes un aporte para financiar nuestra labor: no cobramos por informar, pero apostamos porque los lectores vean el valor de nuestro trabajo y hagan una contribución económica que es cada vez más necesaria.

HAZ TU APORTE

Es completamente seguro y solo toma 1 minuto.

Ayúdanos a cubrir todo el país
Hazte Superaliado/a