Barquisimeto.- Con la llegada del 1 de octubre, se intensifican las expectativas de un “adelanto de las navidades” anunciado por Nicolás Maduro a principios de septiembre. Sin embargo, un recorrido por las principales plazas de la capital larense este 1 de octubre revela una realidad distante de la festividad: los únicos que comienzan a adornar la ciudad son la Gobernación de Lara y la Alcaldía de Iribarren, lideradas por Adolfo Pereira y Luis Jonás Reyes, ambos del oficialista PSUV.
“Es una locura, pero bueno, habrá que aceptárselo”, comentó un vendedor de libros en la Plaza La Moneda, ubicada justo frente a la sede de la Gobernación. Los trabajadores del ente gubernamental, simplemente decidieron adornar su puesto de libros con luces en forma de lluvia.
Adelantar la Navidad, una estrategia que se ha vuelto costumbre para el Gobierno venezolano
Sin embargo, a solo siete calles de allí, la situación es muy diferente. Un grupo de adultos mayores del estado Lara se agrupa para exigir un reajuste en sus pensiones. Desde 2022, reciben 130 bolívares, equivalentes a 30 dólares en ese entonces, pero hoy apenas alcanzan para 3.5 dólares.
“Con eso solo puedo comprar un paquete de café, una harina y una empanada”, protestó Héctor Sequera, de 92 años, dirigiéndose a Nicolás Maduro: “Señor presidente, usted dice que las navidades comienzan ahora en octubre, pero ni en octubre, noviembre o diciembre vamos a tener navidades. Con 130 bolívares al mes, no alcanza ni para un día. Si le diera eso a un familiar suyo, no le alcanzaría ni para una Pepsi”.

Más allá, en la calle 25 con carrera 17, justo en la plaza Bolívar, Boric González, un ciudadano de Barquisimeto, observaba con indiferencia como la Alcaldía de Iribarren instala adornos frente al Palacio Municipal. Al opinar sobre la escena, expresó: “Cuando llegue diciembre, se perderá la emoción de la época, las gaitas… no tiene mucho sentido”.
Durante el recorrido por el centro de Barquisimeto, se hizo evidente que, más allá de la decoración gubernamental, ningún negocio, persona o hogar parecía dispuesto a celebrar la Navidad. La indiferencia frente al anuncio de Nicolás Maduro predominó, dejando entrever que la llegada de la festividad es un pendiente más lejano en la vida de los barquisimetanos.