Comerciantes denuncian que el ambulatorio Petra Emilia Moreno, ubicado en la avenida Moreno de Mendoza, en el mercado periférico de Ciudad Bolívar, es uno de los habilitados para realizar las pruebas PCR a pacientes con sintomatología asociada al COVID-19, por lo que a diario hay largas colas de personas esperando para hacerse el hisopado.
«Están haciendo la prueba dentro del mercado, al lado de los negocios. Ya hay compañeros que están arrojando positivo por lo que estamos haciendo un comunicado para llevarlo a las autoridades de salud, porque esto es un foco de infección para nosotros y los compradores», denunció a El Pitazo uno de los comerciantes que pidió no ser identificado.
Epidemiólogo de hospital centinela en Táchira reporta incremento de ingresos a triaje respiratorio
Un incremento de ingresos de pacientes al área de triaje respiratorio del Hospital Central de San Cristóbal se reportó la semana pasada, según informó este lunes 12 de abril a los medios de comunicación el epidemiólogo del centro centinela del estado Táchira, Noel Calderón, quien destacó que ya está la segunda ola de contagios de la pandemia por COVID-19 en la entidad andina.
El Táchira se había mantenido durante el mes de marzo y lo que va de abril con bajos reportes de COVID-19 en comparación con los meses de noviembre y diciembre de 2020, y enero y de febrero de 2021, y aunque las áreas de hospitalización del centro centinela no están copadas, Calderón manifiesta que sí hay un incremento en comparación con semanas anteriores, por lo que solicita a la ciudadanía cumplir con el distanciamiento social, el lavado de manos y el uso de tapabocas.
Casa de paso temporal en frontera atiende hasta 50 migrantes a diario
A diario llegan venezolanos que cruzan la frontera para entrar al país o ir a otros rumbos. La mayoría lo hace en condiciones precarias, sin dinero para alimentación u hospedaje. Estas distintas situaciones llevaron a que la Organización Internacional para las Migraciones (OIM) y la Diócesis de San Cristóbal inauguraran una casa de paso temporal en la frontera.
La casa es propiedad de la Diócesis desde hace 93 años y estaba abandonada, por lo que la reparación se desarrolló desde septiembre de 2020 hasta marzo de este año, cuando se finiquitaron los trabajos y se dio inicio a la atención con desayuno, almuerzo, cena, camas y duchas a quienes van o vienen del país.