Por Titi González
Caracas.- Venezuela superó los 100.000 casos de coronavirus. Sin embargo, oficialmente los contagios diarios han bajado, a pesar de que en los últimos meses el Gobierno nacional ha flexibilizado las medidas. Esta disminución es un caso contrario a lo que pasó en la mayoría de los países, que cuando relajaron el confinamiento, los casos subieron significativamente.
No es un secreto que diferenciar las semanas de cuarentena radical de las de flexibilización cada vez es más difícil debido al incumplimiento de las medidas por parte de la población e incluso por parte del sector oficial. Es una realidad inocultable que los políticos no han seguido los lineamientos contra el COVID-19.
En medio de la campaña por las elecciones parlamentarias del 6 de diciembre, el confinamiento ha quedado en el olvido. Concentraciones masivas y reuniones en comunidades no han cambiado su estilo por la pandemia.
Metro de Caracas reduce todos los protocolos de prevención del COVID-19
Muchos candidatos han ignorado las medidas incluso en las semanas de cuarentena radical, demostrando mayor interés por sus cargos políticos que por la salud de las personas. Esta situación fue advertida incluso por Nicolás Maduro.
En general los venezolanos han relajado sus prevenciones. En diversos lugares, como mercados, la falta de medidas de bioseguridad es preocupante porque esto puede convertirse en un foco rápidamente, como pasó hace meses en el mercado Las Pulgas de Maracaibo.
El intercambio de dinero y enseres más la falta de mascarillas son una combinación letal para poblaciones vulnerables. En estos lugares es necesario implementar medidas especiales, como controlar la cantidad de personas que ingresan y exigir el uso de la mascarilla.

