Caracas.- Luego de 17 días en huelga de hambre, este 6 de enero en horas del mediodía, la defensa del Teniente Coronel del Ejército, Igbert Marín Chaparro informó que el militar decidió suspenderla. Esto luego que los representantes de la Oficina de la Alta Comisionada para los Derechos Humanos (DDHH) de Naciones Unidas en Venezuela pudieron visitarlo.
Los representantes de la Oficina que dirige Michelle Bachelet ingresaron a constatar el estado de salud de Marín Chaparro, detenido en la Dirección General de Contrainteligencia Militar (Dgcim), y llegaron a un acuerdo con él y las autoridades comprometiéndose a atender algunas de sus demandas. Entre ellas, verificar las condiciones en las que se encuentran los presos políticos en los distintos centros de reclusión.
En una carta pública, Marín Chaparro exigía la visita de distintas instituciones como la Cruz Roja para que constataran las condiciones de los presos políticos.
El caso
El Teniente Coronel del Ejército Igbert Marín Chaparro fue arrestado el2 de marzo de 2018. Ese día lo llevaron con la excusa de que le harían una entrevista en la Dgcim ubicada en Boleíta, Caracas.
Marín Chaparro denunció que fue torturado durante siete días con bolsas en la cabeza, golpes, gases lacrimógenos, dejándolo con varias costillas fracturadas. Y que, aunque un médico forense lo vio, no hizo nada ni tampoco los fiscales.
El militar fue el número 1 de su promoción y al momento de su detención era el comandante del Batallón Ayala de Fuerte Tiuna. Fue detenido junto a otros comandantes del Ejército y condenado a siete años y seis meses de cárcel en 2020.
Su defensa apeló la decisión y la Corte Marcial anuló la sentencia. Sin embargo, la Sala Penal del Tribunal Supremo de Justicia (TSJ) anuló la decisión de la Corte Marcial y ordenó una nueva audiencia. De eso ya han transcurrido poco más de seis meses y no ha sido convocada.
La defensa ha solicitado una medida humanitaria para el militar que llegó a pesar 58 kilos y estar recluido “enuna celda de 5 por 5 metros”, según denunció. También reclamó que en tres meses sólo vio una vez la luz del sol.