Caracas. – No fue una decisión fácil ni grata, pero sí necesaria porque su visión de cómo hacer política distaba de la de Voluntad Popular (VP), partido en el que militó por casi 11 años. El diputado de la Asamblea Nacional por el estado Táchira, Rosmit Mantilla, dejó la tolda naranja este 8 de junio alegando que su salida se debía a “diferencias sanas”.
En conversación con El Pitazo, este 9 de junio, el parlamentario dijo que no hubo un punto de quiebre o una acción que determinara su alejamiento, sino que se trató de una consecución de hechos. El primer roce fue cuando VP decidió participar en las elecciones a gobernadores, celebradas el 15 de octubre de 2017. Y el segundo, cuando decidieron sentarse a dialogar con el gobierno de Nicolás Maduro, a finales de 2017.
“No los acuso de haber ido a dialogar porque lo hicieron con la mejor intención de salir de esto (…) Y seguiré apoyando a Juan Guaidó como presidente de la Asamblea Nacional y presidente interino, aunque no esté en Voluntad Popular.”, señaló.
El diputado evoca sus dos años tras las rejas en el Servicio Bolivariano de Inteligencia Nacional (Sebin) para asegurar que conoce perfectamente al chavismo y al madurismo: “Son unos delincuentes, no se comportan como gobierno”.
“Difícilmente se va a encontrar una solución política sana y en paz cuando del otro lado del río no hay políticos sino delincuentes”, opina Mantilla sobre los procesos de diálogo y negociación en los que ha participado el partido en el que militó hasta hace un día.
A Mantilla no lo presionaron ni dentro ni fuera del partido para que dejara la organización. De hecho, tiene varios meses sin comunicarse con el líder de VP, Leopoldo López. Tampoco recibió ofertas del diputado Luis Parra y de quienes lo acompañan. Ni hubo discusiones con sus compañeros, solo se trató de una decisión conversada desde hace más de un año con su equipo y familiares, basada en su inconformidad con la línea política de VP.
Dice estar firme en sus convicciones y ser leal a quienes votaron por él en 2015, cuando estaba preso por supuestamente planificar protestas en 2014.
Sobre cómo debería ser la política que lleve adelante VP, el parlamentario respondió que hay que sincerarse, reconectarse con el ciudadano, depurar e identificar qué dirigentes y activistas son los que ayudan o “sabotean”. “La política venezolana enfrenta una gran crisis moral. Esa es la razón por la que no hemos podido conseguir la democracia”, precisó.
A su juicio, unas elecciones podrían ser la salida a la crisis que enfrenta Venezuela, pero debe ser un proceso sin Maduro en el poder, sin un Consejo Nacional Electoral escogido por el Tribunal Supremo de Justicia y con presencia de observadores nacionales e internacionales. “Nadie quiere una mortandad. Queremos refundar la República destruida por el chavismo”, enfatizó.
Servir desde la minoría
“Brincar de una casa a otra no es algo ético”, aclara Mantilla, suplente del diputado Sergio Vergara por el circuito 5 del estado Táchira. Con esta afirmación quiere decir que seguirá en la unidad democrática como un factor independiente, como un diputado que representa a las minorías en el Parlamento.
No ha recibido propuestas para incorporarse a las filas de otro partido y tampoco está interesado en tenerlas por el momento.
El dirigente ahora vive en Francia. En agosto de 2017, nueve meses después de haber recibido las medidas sustitutivas de libertad, decidió salir del país porque conoció que había intención de levantarle la libertad condicional y devolverlo a una celda.
En este momento se mantiene gracias a una beca que recibió en la Universidad de Lyon, donde cursa un programa especial para refugiados, y por el cual le permiten tener acceso a una carrera de pregrado o a un master. También recibe ingresos por trabajos en redes sociales y colabora con la embajadora de Venezuela en Francia, Isadora Zubillaga.
Mantilla es el segundo dirigente que renuncia a VP recientemente. La primera fue la dirigente juvenil Ana Karina García, quien, sin dar detalles, precisó que por la información a la que tuvo acceso y los hechos que se dieron frente a ella se deslindaba.
Pero ya otros habían renunciado con anterioridad. Es el caso del diputado Luis Florido y del dirigente sindical Iván Freites.
El Pitazo contactó a la dirigente García, así como a Emilio Graterón, coordinador nacional encargado de VP, pero ninguno contestó.
DIRIGENTE ANA KARINA GARCÍA RENUNCIA A SU MILITANCIA EN VOLUNTAD POPULAR