Caracas.– La actual asesora senior del Centro Carter para Latinoamérica y el Caribe, Jennie Lincoln, tuvo una intervención en el Consejo Permanente de la Organización de Estados Americanos (OEA) y expresó su preocupación sobre la falta de transparencia del Consejo Nacional Electoral (CNE) de Venezuela en los resultados de las elecciones presidenciales del 28 de julio.
Además de esto mostró actas de votación que, según afirmó, evidencian la opacidad en el proceso electoral venezolano, destacando que el CNE no ha publicado los resultados desglosados mesa por mesa ni ha permitido el acceso a las actas de votación.
La organización fue fundada en 1982 por el expresidente de EE. UU. Jimmy Carter y su esposa Rosalynn. El centro Carter actúa como observador en procesos electorales y mediador en crisis internacionales. Tiene sede en Atlanta, en el estado de Georgia, hogar del exmandatario. La organización comparte instalaciones con la Biblioteca Presidencial Jimmy Carter y trabaja en forma asociada con la Universidad de Emory.
En Venezuela, el Centro Carter tiene una extensa experiencia como mediador en la crisis política y polarización de la sociedad venezolana, escenario que se acentuó después de 2002, apenas tres años después del ascenso de Hugo Chávez al poder.
El mismo expresidente Jimmy Carter visitó el país al menos dos veces. La primera vez fue en julio de 2002, tres meses después del golpe de Estado del 11 de abril. La segunda visita se produjo el 15 de agosto de 2004, cuando participó como observador de las elecciones de ese año.
Centro Carter presenta en la OEA actas de la elección presidencial del 28Jul en Venezuela
En el país, el Centro Carter tuvo como representante a Jennifer McCoy, especialista, internacionalmente conocida en política venezolana. McCoy representó al Centro Carter en el esfuerzo de mediación tripartita con la ONU y la OEA entre 2002 y 2004, dirigió misiones de observación electoral y proyectos de fortalecimiento de los medios hasta 2015. También al argentino Héctor Vanolli, exfuncionario de la OEA en Washington, quien fue representante permanente en Venezuela de 2005 a 2016.
El Centro participó en la Mesa de Negociación y Acuerdos (2002-2003) y en el proceso de facilitación del proceso de diálogo junto con la Organización de Estados Americanos (OEA). También participó como observador electoral en el Referéndum revocatorio presidencial de 2004, celebrado el 15 de agosto.
Asimismo, estuvo presente en el Referéndum Aprobatorio de la Enmienda Constitucional del domingo 15 de febrero de 2009 que enmendó los artículos 160, 162, 174, 192 y 230 de la Constitución y habilitó la postulación de cualquier cargo de elección popular de manera continua (releeción indefinida).
A partir de 2006 desapareció la figura de la observación electoral, reemplazada por la de “acompañamiento electoral”, con limitaciones de evaluación del proceso –en tiempo, acceso e independencia del organismo electoral–, así como la prohibición de emitir informes públicos sobre sus consideraciones.
El 31 de mayo de 2015 cerró su oficina en Caracas, que estuvo en funcionamiento desde 2003. La decisión se produjo tras la renuncia de los representantes Jennifer McCoy y Héctor Vanolli, quienes se habían dedicado con esmero a la resolución de la crisis política local.
El 5 de agosto de 2015, anunció finalmente el cese de sus operaciones en Venezuela para «enfocar sus recursos limitados en otros países que han solicitado su apoyo». Una semana antes del anuncio, el presidente Nicolás Maduro había descartado la presencia de observadores internacionales para la supervisión de las elecciones parlamentarias del 6 de diciembre.
«Con el presente informe, el Centro Carter cierra el seguimiento al proceso político electoral que venía haciendo en Venezuela desde agosto de 2014″, expresó la organización en un comunicado al cesar operaciones en el país.
Representantes de la organización, sin embargo, llegaron nuevamente al país el 2 de octubre de 2021 para presenciar el simulacro electoral del 10 de octubre de ese año y acudieron para evaluar la posibilidad de enviar observadores para las mega elecciones regionales y locales que se celebraron el 21 de noviembre.
El rector principal del Consejo Nacional Electoral (CNE) en ese momento, Roberto Picón, dijo en ese entonces que la idea era que el Centro Carter pudiera determinar en qué condiciones enviarían una misión de observación para las megaelecciones de noviembre.
En un informe preliminar publicado el viernes 3 de diciembre, el Centro Carter concluyó que a pesar de algunas mejoras respecto a procesos anteriores, los comicios regionales del 21 de noviembre en Venezuela no fueron unas elecciones democráticas.
Lo mismo ocurre este 2024, pues el centro fue uno de los observadores internacionales de la elección presidencial en Venezuela del 28 de julio y aseguraron que el proceso no cumplió con los estándares internacionales y no puede ser considerado democrático.