El exministro de Petróleo de Venezuela y expresidente de PDVSA Rafael Ramírez dijo, durante una entrevista con EFE, que el país debe generar un «proceso de unidad nacional con una junta patriótica» para remover al presidente Nicolás Maduro del poder, ya que considera que no está capacitado para gobernar.
«Tenemos que ir con un proceso de unidad nacional con una junta patriótica como la que tuvimos en el año 58 para sacar al dictador Marcos Pérez Jiménez, uniendo todos los factores políticos apegados a la Constitución, a nuestros planes y el respeto a nuestras leyes», señaló.
Venezuela dañada
Ramírez, quien culpa a Maduro de la actual situación económica y social del país, aseguró que «el daño es tan profundo que no se va a resolver solo», por lo que aboga por una un proceso de unidad nacional «que restablezca, en primer lugar, la institucionalidad, el hilo constitucional, las leyes».
En su opinión, el presidente «está manipulando todo para mantenerse en el poder« y, de ese modo, no hay lugar para un espacio «democrático».
«Se mantendrá en la medida en que la oposición no sea soberana en la toma de decisiones, en la medida que le impongan, que sean tan sectarios. Ellos no acaban de ver que el chavismo no tiene nada que ver con el madurismo», señaló el también excanciller.
Insistió en que «el chavismo es un sentimiento, una reivindicación social, un movimiento progresista, de avanzada. Debemos adaptarnos a la nueva situación y tenemos que hacerlo, hacer algo como en España después de la muerte de Franco».
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Sin talante democrático
El expresidente de PDVSA explicó que en 2018, cuanto se estaban planteando las elecciones a la Presidencia, él quería postularse como precandidato del Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV) para competir con Maduro, pero este «no tiene talante democrático y es imposible».
Aseguró que en las actuales condiciones, tampoco «se puede ir a elecciones (legislativas del 6 de diciembre) «porque es increíble como Maduro hace lo que le da la gana con el poder Judicial, con la Fiscalía, con los organismos de seguridad» con el objetivo de ganar.
Ramírez criticó que no puedan votar libremente los más de 4 millones de venezolanos que están fuera del país, entre los que él mismo se encuentra. «No se puede».
«Él (Maduro) tiene un control a través de los programa de cajas CLAP y las ayudas, que cualquier persona que emita una opinión política, sea de un partido, periodista, militar, termina preso».
Eso genera, según el exfuncionario, «miedo» a elegir y manifestarse libremente, por lo que «Maduro va a utilizar estas elecciones para mantenerse en el poder de manera ilegítima, no por las razones que dice Guaidó, sino porque cuando tú te desvías de sus objetivos, pierdes tu libertad».
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Sin constitución, sin leyes
La situación de Venezuela «es un desastre» porque «se está violando la Constitución, las leyes» y, ante esto, «no hay soluciones mágicas para recuperar la estabilidad del país y la prosperidad.
«Yo rechazo las sanciones, las invasiones, no acepto que ninguna tropa ponga un pie en nuestro país, pero también rechazo estas elecciones», reiteró Ramírez, quien, igual que la oposición venezolana, las considera un fraude.
Aseguró no entender «cómo los militares han participado de esta violación de la Constitución, teniendo que ser ellos garantes. Pero los dictadores más emblemáticos, al final, caen, porque el país es insostenible y ya no pueden gobernar, no pueden resolver (…) así que en algún momento habrá una salida», que espera, sea en el marco de la Constitución y «por la movilización del pueblo».
«Pero ahora mismo, Maduro tiene organismos como las FAES (Fuerzas de Acciones Especiales) que son organismos criminales, con ejecuciones extrajudiciales, un sistema de terror y le va muy bien», agregó.
No obstante, confió en que «hay solución» aunque «costará mucho», porque «han destruido el país para mantenerse en el poder, haciendo barbaridades desde el punto de vista político, jurídico, económico».