Caracas.- La noche de este sábado, 13 de agosto, falleció el expreso político y defensor de Derechos Humanos Vasco Da Costa, quien en su momento denunció que durante el tiempo en el que estuvo privado de libertad fue víctima de torturas por parte de funcionarios de cuerpos de seguridad del Estado.
Vasco Da Costa nació el 4 de julio de 1959. Se desempeñó como politólogo y activista del Movimiento Nacionalista Venezolano. La información sobre su muerte fue confirmada por el director de la ONG Foro Penal, Alfredo Romero, quien indicó que Da Costa permanecía en coma desde el 7 de agosto a causa de un derrame cerebral.
Tres veces preso político
Da Costa estuvo preso en tres oportunidades por razones políticas. La primera de ellas fue en 2004, cuando se le involucró en un plan para derrocar al entonces presidente de Venezuela, Hugo Chávez, llamada operación Daktari.
El 24 de julio de 2014 fue detenido nuevamente durante las protestas que se registraron ese año en todo el país convocadas por la oposición venezolana. Se le acusó de asociación para delinquir y fabricación ilegal de explosivos. Por presuntamente colocar estos artefactos en varias partes de Caracas el activista fue encerrado en el Internado Judicial de El Rodeo II y lo liberaron tres años después, el 6 de octubre de 2017 debido a problemas de salud.
Menos de un año después, Da Costa volvió a la cárcel. El 16 de abril de 2018 funcionarios del Servicio Bolivariano de Inteligencia Nacional (Sebin) allanaron su residencia en El Paraíso, Caracas, y se lo llevaron preso de nuevo.
A Da Costa le imputaron los delitos de traición a la patria, instigación a la rebelión, ultraje a la Fuerza Armada Nacional (FAN) y sustracción de efectos pertenecientes a la FAN por supuesta planificación de ataques a sedes de los organismos públicos. Se le impuso como sede de reclusión el Centro Penitenciario de Occidente, en Santa Ana, estado Táchira, pese a que residía en Caracas. En octubre de ese año lo trasladaron a la cárcel de Ramo Verde, en Los Teques.
Torturas y violaciones de DD. HH.
Durante el tiempo que permaneció privado de Libertad, Da Costa fue víctima de torturas y violaciones de derechos humanos, según denunció en varias oportunidades su hermana, Ana María Da Costa.
Cuando fue detenido por última vez, los funcionarios del Sebin ingresaron a la fuerza a la vivienda de Da Costa sin orden de allanamiento ni de aprehensión. Lo golpearon y lo trasladaron a la Dirección General de Contrainteligencia Militar (Dgcim), en Boleíta Norte, donde fue torturado durante 10 días.
Según denunció en ese momento su hermana, el activista estuvo desaparecido hasta el 20 de abril de ese año, cuando fue presentado ante el Tribunal Militar 3° de Control de Caracas, seis días después fue enviado a la cárcel de Santa Ana, en Táchira, y entre los días 16 y 18 de mayo de 2018, los mismos funcionarios de la Dgcim que lo habían maltratado en abril viajaron al Táchira y lo torturaron nuevamente.
En Ramo Verde enfermó tras ser mordido por ratas. “Mi hermano fue mordido por las ratas tras ser encerrado en una celda de castigo, simplemente por emitir una opinión sobre la situación que existe en Ramo Verde. Por eso está enfermo hoy en el Hospital Militar”, dijo Ana María el 17 de octubre de 2019 en una protesta organizada por familiares de presos políticos.
El 10 de octubre de 2019 Da Costa fue trasladado al área de procesados militares del Hospital Militar Carlos Arvelo, en San Martín, Caracas. Según Ana María, la mordedura de unas ratas y las continuas torturas hicieron que Da Costa desarrollara un tipo de cáncer en el ojo izquierdo que lo mantuvo recluido en el centro de salud hasta el 2 de julio de 2020.
Las torturas incluían golpes en los oídos que lo aturdían, según relató su hermana en 2019. Contó que lo mandaron a desnudarse y lo patearon en el abdomen para obligarlo a evacuar y luego ensuciarle el rostro con sus propias heces. Fue colgado hasta que se desmayara y, posteriormente, despertado a patadas. También golpearon su cabeza contra el piso, le colocaron agujas en el tórax y lo conectaron a cables para darle corriente, ciclo que, según dijo la hermana del activista, lo repitieron una y otra vez.
Indulto
En septiembre de 2020, Vasco Da Costa fue liberado tras recibir un indulto del gobierno de Nicolás Maduro. “Tengo miedo y usted sabe qué es lo peor, que tengo razones verdaderas y comprobadas para tener miedo, pero los hombres que se dejan gobernar por el miedo son cobardes”, dijo a su salida de la cárcel de Ramo Verde.