Nicolás Maduro instó este martes al alto mando militar de Bolivia a restituir en el poder a Evo Morales, quien renunció a la Presidencia del país andino el pasado domingo por recomendación de militares y policías.
«Les pido a las fuerzas militares (bolivianas) que respeten al pueblo y restituyan al presidente Evo Morales como dice la Constitución, basta de caos», dijo Maduro durante un encuentro con organizaciones sociales transmitida en cadena obligatoria de radio y televisión.
Asimismo, Maduro invitó a los militares bolivianos a tener «conciencia de lo que están haciendo y lo que van a hacer», y reiteró que Evo Morales es todavía «su comandante en jefe por orden constitucional y voto del pueblo», por lo que insistió en que debe ser restituido en el cargo.
En ese sentido, pidió al ministro de Defensa venezolano, Vladimir Padrino, que se comunique con el general Williams Kaliman Romero para solicitarle que las fuerzas militares bolivianas pongan fin a la represión y la violencia en el país andino.
«Basta de aventuras golpistas y de asonadas militares en América Latina», sostuvo Maduro, que además vinculó al Gobierno de Estados Unidos con lo que llamó «golpe de Estado».
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Consideró, además, que Evo Morales «sigue siendo presidente de Bolivia porque la carta de renuncia no la ha visto la Asamblea Legislativa» y, por tanto, la renuncia «es ilegal».
Para Maduro, «lo que hizo el general Kaliman Romero fue un error: forzar un golpe de Estado, en vez de apoyar a su comandante en jefe Evo Morales Ayma en el diálogo, en nuevas elecciones y en la restitución de la paz».
El líder chavista se mostró preocupado por las imágenes de unos aviones de guerra sobrevolando La Paz y El Alto y alertó de que, a su juicio, «el pueblo de Bolivia no tiene miedo y todo esto pudiera conducir a una guerra civil en Bolivia».
Morales, de 60 años, renunció el domingo en medio de una oleada de protestas y por petición de militares y policías, luego de su triunfo en las elecciones del pasado 20 de octubre, en las que fue reelegido para un cuarto mandato por medio de un fraude, según sus detractores.
Horas antes de su renuncia, había convocado a nuevas elecciones tras la recomendación de la Organización de Estados Americanos (OEA), que divulgó un informe en el que dio a conocer numerosas irregularidades en los comicios del mes pasado.
Esta misma jornada, Morales aterrizó en México junto a quien fuera su vicepresidente, Álvaro García Linera, y en sus primeras declaraciones agradeció al presidente de ese país, Andrés Manuel López Obrador, por concederle un asilo que, aseguró, le «salvó la vida».