Nicolás Maduro afirmó este domingo, 4 de octubre, que más de 10.000 venezolanos contagiados con COVID-19 ingresaron de manera irregular al país a través de pasos ilegales.
Durante un balance de los 203 días de cuarentena en el país, volvió a reiterar su denuncia de que los denominados «trocheros» fueron enviados a Venezuela por el presidente de Colombia, Iván Duque, y el expresidente Álvaro Uribe, como parte de un plan para elevar la curva de contagio nacional.
Señaló que los migrantes venezolanos eran captados por grupos irregulares a los que pagaban para cruzar la frontera sin pasar por los Puntos de Atención Social Integral (Pasi), los cuales eran, según Maduro, infectados con el virus adrede por el gobierno colombiano.
El gobernante señaló que el ingreso de los venezolanos infectados fue la causa del repunte de contagios presentado en el país entre junio y agosto, y que hasta el momento las autoridades sanitarias solo han logrado captar a 6.000 de los migrantes infectados.
Explicó que desde el inicio del decreto de alarma nacional emitido el 13 de marzo, más de 100.000 venezolanos han regresado al país a través del plan «Vuelta a la patria» y por cuenta propia, además de otros 60.000 que entraron por vías ilegales.
Por otro lado, Maduro se solidarizó con el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, por su contagio de coronavirus, y recordó que el mandatario era renuente en un principio a tomar medidas como el uso del tapabocas, por lo que le llamó a la reflexión durante su convalecencia. «Es un cruento enemigo de Venezuela, pero deseamos que tenga salud y vida», dijo.