Caracas.- A los barrios no llega nada, ni siquiera el transporte público», dijo Armando Sandoval, un obrero que tenía 40 minutos esperando un bus para poder llegar a su casa en el sector San Blas, de Petare. Este señor, al igual que la multitud que se amontona en todas las esquinas y espacios vacíos de la redoma de Petare, solo intenta volver a su casa luego de un largo día de trabajo: «Ni siquiera la crisis del transporte nos da descanso a los pobres», comenta.
La crisis del país ha estado marcada por un marcado deterioro en todos los servicios públicos y el transporte no escapa de esta realidad. En lo que va de 2017 los transportistas han denunciado innumerables veces la falta de repuestos y malas condiciones de las calles, avenidas y autopistas; problemáticas que sumadas a las exigencias de aumento de pasaje han originado al menos 3 paros de transporte que han colapsado la ciudad.
Los usuarios sufren el mal servicio y no solo se quejan de los aumentos arbitrarios y el precario estado de los vehículos de transporte público, sino que también expresan su disgusto por las largas horas de espera que provoca la falta de camionetas, que ninguna misión del Ejecutivo o mesa técnica entre transportistas y el Ministerio de Transporte ha podido solucionar.
ESPECIAL | La larga espera de los usuarios de transporte en los barrios
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