Caracas.- Durante la sesión ordinaria de la Asamblea Nacional (AN), este martes, 2 de julio, familiares de militares detenidos acusaron a la
Dirección General de Contrainteligencia Militar (Dgcim) de practicar torturas crueles e inhumanas.
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Según los testimonios, los militares han sido víctimas de torturas como ahogamiento, asfixia mecánica con bolsas, ahorcamiento y fuertes descargas eléctricas.
«Mi esposo Ruperto Molina ha sufrido torturas. Los militares no tienen órdenes de aprehensión, son víctimas de las peores torturas: asfixia mecánica, descargas eléctricas, golpes, cortes en los pies», declaró Keila Flores, durante su derecho de palabra en el parlamento.
Ruperto Molina es teniente coronel de aviación y está detenido desde el 18 de mayo de 2018.
La madre del teniente de fragata Gustavo Carrero Angarita, detenido desde hace 13 meses, relató las torturas a las que ha sido sometido su hijo.
«Mi hijo, junto con los demás detenidos está privado de su libertad de manera arbitraria. Ha sufrido las más indignantes torturas que este régimen pueda hacerle a un ser humano. La primera semana no le permitieron comunicación con familiares, ni ninguno de sus abogados», dijo.
Los familiares aseguraron que los militares han sido obligados a firmar
documentos con los ojos vendados.
Según la Organización No Gubernamental Provea, durante 2018, el 75% de las personas torturadas fueron militares.