La Guaira. Alejandro entra a su escuela, la Unidad Educativa William Lara, en la urbanización Playa Grande, estado Vargas, todos los días a las 7:00 am. En teoría, el niño, que estudia cuarto grado, sale al mediodía, pues es estudiante regular del turno de la mañana.
Las clases del turno de la tarde se inician a la 1:00 pm y culminan a las 5:00 pm. Pero desde que el Gobierno nacional anunció el recorte de horario laboral y escolar para enfrentar la crisis eléctrica, Alejandro solo ve dos horas de clases. Igual les sucede a los más de 300 niños que estudian en ese centro educativo.
LEE TAMBIÉN:
“Los que estudian en la mañana entran a las 7 y debemos irlos a buscar a las 9:30 am, y los que estudian en la tarde fueron ubicados en dos grupos: unos estudian de 10 am a 12 m; y los otros, entre la 12 m y las 2 pm”, cuenta Elvira, la madre de Alejandro. Ella acota que el niño no ha podido avanzar nada desde que las clases fueron retomadas tras los apagones que se registraron en marzo.
En otras 20 escuelas
La situación que enfrentan los niños que estudian en la Unidad Educativa William Lara se repite por lo menos en otras 20 escuelas de la entidad costera, en las cuales se estudia en doble turno.
Lo más grave para los padres es que este “estudio mocho”, como ellos le dicen al horario de solo dos horas de clases, parece que estará hasta que finalice el año escolar, pues en el último anuncio presidencial, la medida fue prorrogada por tiempo indefinido, según el decreto N° 3.837, publicado en la Gaceta Oficial N° 41.623, con fecha 30 de abril de 2019 y suscrito por Nicolás Maduro.
“¿Cómo se pretende que los niños avancen así? Es decir, que el que estudia en una escuela pública solo va a estudiar dos horas diarias mientras arreglan el rollo de la luz. Esto no es justo, porque los que estudian en escuelas bolivarianas sí están viendo por lo menos cinco horas de clases y también los privados están trabajando su turno completo», cuenta la madre de un alumno de la Unidad Educativa Juan German Roscio, en Maiquetía, que solicitó resguardar su nombre
«Uno no tiene plata para estar pagando una escuela privada y por eso los mete en la escuela pública, pero con la idea de que también aprendan, no que solo vean dos horas de clases”, añadió la mujer.
Por su parte, presidente de la Asociación de Padres y Representantes de centros Educativos de Vargas (Asopadres), Johnny Martínez, asegura que “el nivel y la calidad de la educación impartida desde que se aprobó el recorte del horario laboral y escolar se ha visto afectado. Se toman medidas sin medir el impacto que genera en sectores vulnerables, como son los niños en edad escolar”.
El Pitazo solicitó información sobre esta situación a la Zona Educativa de Vargas y la Dirección Regional de Educación, sin recibir respuesta.