Después de un simulacro de votación, al tratarse de una prueba del sistema automatizado y de los distintos protocolos que ejecuta el Consejo Nacional Electoral (CNE), no está previsto totalizar los votos emitidos por los electores que decidieron participar.
Por ser un ensayo, las máquinas de votación (salvo en centros específicos) no están programadas para imprimir el acta de cierre del proceso, así que ninguna fuerza política puede conocer los los resultados, salvo que interrogara a todos los electores a la salida de los centros y los votantes admitieran decirle por quién sufragaron en la prueba.
En los días previos al simulacro de este domingo, el CNE ratificó que no estaba previsto totalizar los resultados de la prueba. No obstante, existe el precedente del año 2012 cuando el Psuv exigió al organismo comicial totalizar los votos del simulacro. En aquel momento, la presidenta Tibisay Lucena argumentó que la petición no era procedente porque sólo había sido solicitada por uno de los dos principales comandos de campaña.
Según han explicado los técnicos que se encargan de auditar el sistema de votación, después de celebrado un simulacro las máquinas de votación son reseteadas para volver a ser programadas con la aplicación electoral que se utilizará el 6 de diciembre.