Miembros de la comunidad holandesa que reside en isla de Margarita (Nueva Esparta) rechazaron este martes, 30 de agosto, la acción policial contra uno de sus connacionales. En un comunicado expresan que a Ronald Hessing se le violaron sus derechos.
«Una semana en el infierno para un ciudadano holandés en Venezuela tras ser secuestrado por la policía local», calificaron la acción. Según señalan Ronald Hessing «fue tomado como rehén por la Policía de Maneiro, en un caso de divergencias con su casera».
Ronald Hessing fue detenido el 24 de agosto y de acuerdo al comunicado «estuvo desaparecido desde el pasado 26 de agosto, sin orden judicial y sin ser acusado de ningún delito. Lo mantuvieron encadenado durante días en una fría habitación de varios calabozos de Caracas, la capital de Venezuela, y no le permitieron comunicarse con nadie, ni siquiera con su abogado».
Deportación
Los funcionarios del Servicio Administrativo de Identificación, Migración y Extranjería (SAIME) revelaron que Ronald Hessing fue deportado el 28 de agosto. Lo colocaron en un avión con destino a Ámsterdam. Esto después que la embajada holandesa en Caracas iniciara una investigación.
En este sentido, la comunidad holandesa considera que los representantes del SAIME utilizaron el miedo psicológico para intimidar a Hessing, «con el fin de ocultar la verdad de que la policía de Margarita (Maneiro) había entrado por la fuerza en su piso de Pampatar antes de extraer sus posesiones adentro».

«Las autoridades de inmigración alegaron que Hessing infringió el artículo 39.1 de la Ley de Extranjería y Migración de Venezuela, que sanciona la entrada en el país con un visado fraudulento. Sin embargo, se trata de una información falsa, ya que nunca se utilizó un visado para entrar en Venezuela, sólo tenía un sello de entrada como turista».
Según sus explicaciones, Hessing solo permaneció en el territorio más tiempo del que debía. Por ello, destacan que el artículo 47 de la citada ley también destaca que los extranjeros que hayan sobrepasado su estancia tienen un año para reunir sus bienes y pertenencias para salir del país. No se encuentra en ninguna parte de la Ley que deban ser detenidos y sin comunicación con su abogado.
Las preguntas que se se hace la comunidad holandesa en isla de Margarita son: ¿Qué le ocurrió exactamente a Ronald Hessing? ¿Fue torturado? ¿Por qué las autoridades de inmigración negaron saber de él? ¿Quién fue el responsable de este trato inhumano? ¿Qué pasó con todas sus propiedades personales?
Ahora esperan el retorno de Hessing a Amsterdam para conocer de su voz qué ocurrió. Además, la comunidad espera «que el gobierno venezolano, incluidos los ministros de Turismo, Interior y Justicia, investigue el escándalo y haga rendir cuentas a los responsables».
Con información de Nota de prensa