Caracas.- En cuatro días son las elecciones parlamentarias en Venezuela. A pesar de que ha sido un proceso cuestionado por la oposición liderada por el presidente de la Asamblea Nacional, Juan Guaidó, porque fue concebido desde la irregularidad, 16 partidos nacionales que se autodenominan opositores postularon candidatos y tienen la expectativa de ser mayoría en el Poder Legislativo. Este 1° de diciembre, Nicolás Maduro reforzó esa hipótesis diciendo: “Si vuelve a ganar la oposición, yo me voy de la presidencia”.
A continuación, El Pitazo expone las razones por las que la oposición no tiene la oportunidad de ser mayoría como en 2015:
- A finales de 2019 y principios de 2020, la Asamblea Nacional inició el proceso para designar a los rectores del Consejo Nacional Electoral, como lo establece la Constitución. Sin embargo, el Tribunal Supremo de Justicia los escogió sin tener competencia para ello, y a partir de allí la mayoría opositora decidió que no participaría en los comicios.
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- En junio pasado, el CNE aprobó una normativa especial para las elecciones parlamentarias que privilegia al Partido Socialista Unido de Venezuela. Una muestra de ello es que, sin base legal ni técnica, crearon una lista nacional de 48 diputados en la que el gobierno postuló a sus principales dirigentes como Diosdado Cabello, Cilia Flores o Iris Varela. Su elección dependerá de los votos que obtengan en las listas regionales.
- La coordinadora de Contraloría Electoral de Súmate, Nélida Sánchez, asegura que no hay posibilidad de que la oposición inscrita gane el Parlamento porque en, primer lugar, van divididos. En segundo lugar, es una oposición amoldada a los intereses de Maduro. “Hay un grosero uso de bienes y recursos del Estado, así como la coacción e intimidación sobre el electorado a través de los programas sociales”, destaca.
- En ello coincide el experto electoral Jesús Castellanos, quien indica que si los partidos distintos al Gran Polo Patriótico querían la mayoría de los escaños debieron consolidarse en una sola fuerza, así como lo ha hecho el oficialismo de forma tradicional.
- Quienes se definen como opositores tienen 16 tarjetas electorales. De ahí destacan dos alianzas que son las que pudieran obtener más curules. Se trata de Venezuela Unida, que la componen Voluntad Popular, Primero Venezuela y Venezuela Unida, bajo la dirigencia de los diputados Luis Parra, José Brito y José Gregorio Noriega. La segunda fuerza es la Alianza Venezuela Democrática que integran Acción Democrática (intervenida por el TSJ), Avanzada Progresista, El Cambio, Cambiemos y Copei. Otros partidos como Movimiento Ecológico, Movimiento Al Socialismo o Soluciones van solos y en algunos estados en alianza con partidos regionales que también buscan apoyarse en ellos para entrar a la AN.
- De acuerdo con una proyección a la que tuvo acceso el Guachimán Electoral, si el chavismo logra un piso de 5,4 millones de votos, logrará 31 escaños de los 48 que hay por lista nacional, mientras que la Alianza Venezuela Democrática obtendría 15 curules.
- Dice el director de la encuestadora Delphos, Félix Seijas, que se estima una participación del 30% del padrón electoral que es de 20.733.941; es decir, votarían alrededor de 6,2 millones de electores. No obstante, el sistema electoral está diseñado para que la mayoría de las curules sean para el Psuv, y que unos pocos se distribuyan entre los partidos minoritarios.
- En su cuenta de Twitter, Seijas expresó que la frase de Maduro es fácil decirla a cuatro días del 6D, pero hace seis meses no la habría dicho. “El Psuv tiene la elección en el bolsillo. El reto es llevar a sus 5 millones de electores a los centros”.
- Ahora bien, qué necesitaba la oposición para ser mayoría. Castellanos responde: una administración electoral confiable y técnica, un reconocimiento legal y político de los partidos, un verdadero Estado de derecho, eliminación del ventajismo electoral y una observación electoral nacional e internacional conforme a estándares internacionales.