El comisionado presidencial para Asuntos Exteriores, Julio Borges, se reunió, este domingo 29 de septiembre, con el secretario de Estado de El Vaticano, Pietro Parolin, para solicitarle que la Iglesia Católica ejerza mayor presión sobre Europa, donde residen funcionarios de Nicolás Maduro que han cometido violación de los derechos humanos.
«En Europa viven como reyes familiares y testaferros de la dictadura con el dinero robado a los venezolanos. Necesitamos que se presione a toda la Unión Europea para que se tomen medidas sobre este tema y también sobre el régimen de Maduro», le manifestó a Parolin, quien defiende que en Venezuela se encuentra salida a la crisis por la vía de la negociación.
Borges, quien estuvo participando junto a otros parlamentarios en la Asamblea General de las Naciones Unidas, le manifestó al representante del papa Francisco que “Nicolás Maduro fue quien decidió acabar con el proceso de negociación de Barbados”.
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Sostuvo que la delegación del presidente encargado Juan Guaidó le presentó una propuesta concreta a la del oficialismo en Barbados, pero Maduro decidió “cerrar la puerta” a la opción pacífica a la que, incluso, apuestan muchos países de la región.