Gabriel Ochoa, subgerente de comunicaciones de Peta Latino, aseguró en un forochat de El Pitazo que anualmente cientos de miles de animales en el mundo son envenenados o asesinados en los laboratorios tras sufrir pruebas crueles con diversos químicos y otras sustancias antes de ser utilizados en humanos.
Sin embargo, la organización Peta asegura que las pruebas en animales han demostrado ser ineficaces, poco confiables y no aseguran que una sustancia pueda ser aplicable a los humanos. Por lo contrario, existen pruebas modernas que no utilizan animales, ofrecen resultados más fiables y son más económicas. Por ejemplo, los cultivos de tejidos y los modelos computacionales.
Este negocio de experimentación con animales sigue existiendo a nivel mundial por lo sencillo que es conseguir especies para pruebas y, de ello se lucran personas.
PETA es la organización de derechos de los animales más grande del mundo, con más de 6,5 millones de miembros a nivel global, donde su atención se centra en cuatro áreas de riesgo caracterizadas por el sufrimiento animal prolongado: la industria alimenticia, la moda, el entretenimiento y la experimentación en laboratorios.
El vocero comentó que cualquier atracción que necesite colocar a un animal silvestre en un ambiente que lo prive de una vida natural es inherentemente humano y tendrá consecuencias graves en la salud del animal, indicó el especialista.
LEE TAMBIÉN
CLAVES | ¿Cómo y dónde denunciar el maltrato animal en Venezuela?
Además, apuntó que muchos lugares de entretenimiento con animales se hacen llamar santuarios, sin embargo, la interacción entre algunas especies y los humanos no es natural. Así como también, recalcó que los circos y parques marinos son espacios donde los animales son sometidos a tratos muy crueles, aislamiento y hasta privación de comida y agua para lograr que los mismos mantengan cierto comportamiento.
La crueldad animal también está presente en la industria alimenticia. Y, según Peta el consumo de carnes animales es incipientemente innecesario y es considerado un proceso lleno de crueldad ya que mantienen a los animales hacinados en condiciones insalubres y son sometidos a una vida antinatural con graves sufrimientos físicos.
Miles de animales mueren cruelmente cada año para que sus pieles sean utilizadas por seres humanos en productos como correas, zapatos, abrigos. Según los datos de Peta, por cada suéter de lana en el mercado, existe un animal mutilado.
Desde hace 20 años se ha mejorado la cultura de los humanos con respecto a los animales, sin embargo, el vocero explicó que los gobiernos y políticos deben generar leyes de protección para que el cambio sea mayor. Así como también recomendó a las organizaciones y ciudadanos seguir trabajando para concientizar a la población con respecto al maltrato animal. “La formación viene desde el hogar, los padres o cuidadores deben enseñarles a sus hijos que maltratar a cualquier animal no está bien”, dijo.
Para finalizar reflexiona que la cultura del ser humano donde el trato hacia los animales se cómo objetos deben cambiar y, las organizaciones trabajan arduo para esto, sin embargo, toca mucho camino por recorrer”, finalizó Ochoa.