La gran preocupación de maestros, representantes y estudiantes se encuentra latente ante el anuncio del ejecutivo venezolano sobre el regreso presencial a las aulas en el mes de abril del año en curso.
Lila Vega, pediatra y miembro de la Red de Madres, Padres y Representantes afirmó en un “Café con El Pitazo” este 09 de marzo de 2021 que sí es posible regresar a las aulas de clases, siempre y cuando se cumplan estrictamente las medidas y las acciones de prevención ante el COVID-19.
Países como Colombia, Argentina y Canadá, han tenido resultados efectivos y favorables con el retorno a sus aulas de clases y, a su vez, han llegado a la conclusión que, la transmisión de la enfermedad dentro de las escuelas es menor de la que ocurre en la comunidad. A diferencia de Venezuela, Vega indicó que la educación a distancia no ha servido a los fines que se proponía.
LEE TAMBIÉN
Venezuela reporta cifra más alta de muertes por COVID-19 en transcurso de 2021
“Es posible y también es necesario regresar a las actividades escolares presenciales”, dijo Vega. Actualmente 1 de cada 5 niños en el mundo se encuentra fuera del aula, en cambio, Venezuela tiene 5 de cada 5 niños fuera de las aulas de clases, según la especialista.
Según Vega, la vuelta a las actividades escolares presenciales requiere que los miembros de la comunidad educativa entiendan algunos conceptos que, normalmente se lo dejan a los especialistas, tales como de qué forma de transmite el virus, qué cantidad de días puede incubarse el virus en el cuerpo y cuáles son las medidas de bioseguridad correctas que deben seguir.
Luego de entender todo lo que comprende el Covid-19, Vega indicó que esto permite identificar las medidas que protejan a las personas del contagio. Uso adecuado de tapaboca, distancia física de 2 metros, lavarse las manos con jabón, limpieza de superficies y seguimiento de contactos son los elementos que Lila Vega recomienda implementar rigurosamente para la vuelta a clases.
La bioseguridad en la escuela es prioridad
El tema de la distancia física como medida de prevención para el contagio es mucho más complicado en una escuela, ya que quizá el espacio no lo permite. Sin embargo, Vega aseguró que lo más probable y lógico es que el regreso a las aulas no sea con una gran cantidad de alumnos. Por lo contrario, recomendó que deben iniciar con grupos reducidos, y planificar muy bien que los mismos no se aglomeren con otros salones en horarios como entrada, recreo y salida.
El lavado de manos, es el elemento fundamental que puede representar un reto para buena parte de las escuelas venezolanas por la escasez del líquido. Vega explicó que las escuela deben hacer un esfuerzo para realizar un acopio de agua o evaluar un mecanismo para que exista manera de lavarse bien las manos antes de entrar a las aulas de clases. Así como también recalcó que es importante que las instituciones tengan el recurso de alcohol para rociar las manos.
La limpieza de superficie debe distribuirse en los escasos recursos y materiales, por lo tanto, la experta recomendó planificar el aseo regular de superficies de contacto frecuente. La misma se debe hacer con agua y jabón y posteriormente agua y cloro.
LEE TAMBIÉN
CLAVES | Las variantes del COVID-19 que surgen en medio de vacunación mundial
El seguimiento de casos y contactos es uno de los elementos vitales que sugirió Vega en el forochat. Explicó que los miembros de la comunidad educativa no pueden asistir al plantel si presentan cualquier tipo de malestar referente al COVID-19, así como también se debe realizar este seguimiento al personal de limpieza, estudiantes y/o personal administrativo.
Antes de iniciar la ronda de preguntas por parte de los lectores, Vega aseguró que las escuelas pueden ser sitios seguros si se cumplen estrictamente las medidas y acciones de prevención ante el Covid-19.
Los lectores preguntan
Lorena Monsalve desde San Cristóbal pregunta ¿Es cierto que para volver a las aulas debe estar vacunado más del 50% de la población venezolana? Vega explicó que países con muchos más recursos de que los que posee actualmente Venezuela, les tomará aproximadamente hasta el mes de septiembre de 2021 para vacunar a su población mayor de 18 años y que, los estimados que anuncian algunos expertos internacionales, colocan el 2023 como fecha de vacunación a la totalidad de la población venezolana. “Esperar dos años para abrir las escuelas es un daño irrecuperable, no podemos esperar a la vacuna para volver a las aulas de clases”, afirmó.
¿Cómo volverán los niños a las aulas si los colegios no cuentan con los recursos y el gobierno tampoco se aboca al problema?, pregunta Yeidú Álvarez desde la parroquia Santa Rosalía.
Efectivamente el Estado no ofrece las condiciones para abrir nuevamente los planteles educativos, sin embargo, para culminar, Vega aseguró que si la comunidad educativa trabaja de la mano con la escuela, los maestros, estudiantes, representantes y organizaciones, podrán lograr conseguir donaciones y dotación de insumos para que tanto los alumnos como los docentes puedan cumplir con todas las medidas de protección al incorporarse a sus salones de clases de manera paulatina.
“La comunidad educativa está dispuesta abrir las escuelas en defensa del derecho de la educación de los niños, siempre y cuando se tomen las medidas pertinentes”, concluyó Vega.