Cumaná.- Durante una marcha pacífica organizada por los sindicatos dependientes de la Gobernación del estado Sucre, funcionarios de la Policía regional detuvieron a tres sindicalistas.
El secretario general del Sindicato Único de los Empleados Públicos y Otros Organismos del estado Sucre (Sueples), Ramón Gómez, y los dirigentes del Sindicato de la Construcción en la entidad, Carlos Ochoa y Joel Morales, fueron detenidos este jueves 30 de enero aproximadamente a las 11:00 am en la plaza Bolívar de Cumaná.
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El tesorero de Sueples, Gregory Lunar, señaló que acudieron a la casa de gobierno con el fin de entregarle al gobernador Rojas un documento petitorio en el cual estaban señaladas las deudas que mantiene el Ejecutivo regional con sus trabajadores.
Lunar contó que los representantes de los obreros fueron recibidos de forma violenta por los funcionarios, quienes impidieron el paso de los sindicalistas y les rompieron los papeles que llevaba Gómez en sus manos.
“Los obreros y empleados están cansados porque su salario no les alcanza para cubrir sus necesidades”, indicó Lunar, quien señaló que la masa obrera exige al gobierno de Rojas que se realice el recálculo de las prestaciones de los jubilados en 2018, la restitución de las escalas salariales y los servicios funerarios y de Hospitalización, Cirugía y Maternidad (HCM).
Hechos
Carmen Vellorín, una trabajadora que participó en la concentración, narró que los empleados y obreros participaron en una asamblea el día de hoy en la plaza Andrés Eloy Blanco. En la reunión se acordó ir hasta la sede de la Gobernación a solicitar respuesta a las deudas que mantiene el Ejecutivo regional con más de 27.500 padres y madres de familias que laboran en las instituciones públicas.
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Cuando las personas llegaron a las adyacencias de la Gobernación, uno de los choferes del primer mandatario regional les dijo a los trabajadores que Rojas se encontraba en su despacho. Acto seguido, los sindicalistas solicitaron a los funcionarios permiso para ingresar a estas instalaciones a entregar ese documento al gobernador y unos de los policías rompió las hojas.
“Allí comenzó una discusión entre trabajadores y los policías. En medio del cruce de palabras, un guardaespaldas del gobernador lanzó una patada a Gómez, quien cayó al suelo y luego, entre empujones y golpes, fue ingresado a una patrulla de la policía estadal”, dijo Vellorín.