Maturín.- Maximiliano Vallenilla tiene 4 años de edad y quiere correr como lo hacen sus amiguitos. De momento solo puede caminar hasta donde se lo permiten los dos pequeños huesos que le sirven de rodillas. A veces gatea para jugar y en otras, usa una patineta que le regalaron en Navidad para movilizarse en su casa y cerca de ella en La Cruz, al oeste de Maturín, estado Monagas.
Su madre, su familia y sus vecinos le dicen Maxi de cariño. Le diagnosticaron Hipoplasia postaxial bilateral al nacer. Se trata de una enfermedad que le deforma sus piernas y le impide caminar. Norluis Salinas es su mamá y este 18 de febrero contó a El Pitazo que mientras estuvo embarazada, su ginecóloga nunca le contó sobre la condición de su bebé.
A Maxi no se le desarrollaron sus rodillas. Necesita prótesis inferiores y antes debe pasar por la amputación de sus dos piernas. Es el diagnóstico que le dieron en el Ortopédico Infantil de Caracas a donde acudió tan pronto se recuperó de la cesárea.
La cirugía que amerita el niño es costosa. En 2019 tenía un precio de 230 millones de bolívares en el Ortopédico Infantil. En ese entonces, era el presupuesto más bajo que le podían ofrecer de acuerdo al estudio socioeconómico que le hicieron. “No sé cuál es el precio actual de la cirugía porque ahora su doctor y la doctora que le colocará las prótesis deben evaluarlo de nuevo”, explicó.
La familia decidió hacer viral su caso en redes sociales para buscar ayuda económica. La consulta con el especialista en miembros inferiores cuesta 9 dólares y la consulta de la especialista en prótesis 18 dólares. El pasaje desde Maturín a Caracas vale 35 dólares y de Caracas a Maturín 60 dólares. La familia ha reunido algo de dinero, pero no es suficiente para cubrir todos los gastos.
El sueldo que devengan los padres de Maximiliano, como empleados de Gasmaca y Gas Comunal, no les ha permitido completar el dinero. Hoy esperan que la buena voluntad de los venezolanos o de alguna persona en el exterior pueda ayudarles a costear la operación. En la cuenta de Instagram muestran su caso y cómo pueden ayudar: @maxilianodavidoficial.
Un poco de Maxi
Maximiliano David Vallenilla Salinas cumplirá 5 años de edad el 28 de marzo. Nació en Maturín. Es el primer hijo de Norluis y el tercero de su papá. Estudia segundo nivel en la Escuela Luisa Cáceres de Arismendi para niños con discapacidad. “Es muy inteligente”, expresa Norluis. Le encanta dibujar, su madre dice que lo hace muy bien a pesar de que solo tiene dos deditos en ambas manos.
Esa también es una condición de Maxi que no le impide trazar los puntos para formar las vocales en una hoja o hacer otras actividades. Juega al escondite gateando. Su madre contó que sus amiguitos se adaptan a la realidad de Maxi y corren más despacio para que él pueda participar en el juego.
“Como está creciendo nos pregunta por qué no puede caminar y por qué tienes las piernas así, dobladas. Nosotros le explicamos lo que ocurre y también le decimos que debemos llevarlo a Caracas para que le coloquen unas piernitas”, expuso. Norluis agrega que Maxi quiere salir a la calle a jugar fútbol, béisbol y correr, sólo correr.