Carúpano.- Más de 200 vendedores informales que hacen vida en el centro de la ciudad de Carúpano, estado Sucre, serán reubicados debido a la desorganización que existe en las calles del casco central del municipio Bermúdez. Así lo informaron este martes 19 de noviembre concejales durante el desarrollo de la sesión de Cámara Municipal.
La situación se origina luego de que la Asociación de Buhoneros solicitara un derecho de palabra ante los ediles, lo que ocasionó un debate entre los presentes. Los vendedores informales mostraron su descontento ante la circunstancia de haber sido multados por la Alcaldía del municipio Bermúdez por no vender el rubro que especifican en sus permisos.
“Queremos que el Concejo nos dé un permiso amplio donde en temporadas podamos vender otros rubros. Ahorita la situación esta difícil y en el mes de enero yo no puedo vender ropa, cuando la gente busca comida y es injusto que nos multen por vender otros rubros. Esperamos tener una respuesta rápida”, añadió Eucaris Astudillo, presidenta de la asociación.
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Ante el hecho, los concejales manifestaron que existe desorden en el centro de la ciudad porque se han colocado vendedores informales con la llegada de la temporada navideña sin ninguna permisología, desconociendo las leyes. El hecho ha creado anarquía en el centro de la ciudad porque las calles han ido colapsado entre los buhoneros y el tráfico vehicular.
“Aquí se trata de un ganar, ganar. Los vendedores están pidiendo un cambio de rubro y vamos a atender su solicitud por mesas de trabajo el día jueves. Esperamos que entre lo que queda del mes de noviembre y diciembre podamos organizar a los vendedores informales, entre los que también existen irregularidades de algunos que no aparecen en censo y también deben prestar apoyo en el ordenamiento de la ciudad”, agregó.
Los ediles dejaron claro que una comisión atenderá la situación, que se aprovechará para darle un mejor rostro a la ciudad en la temporada navideña. Es de destacar que el censo de vendedores informales que manejan los concejales se triplica con la cantidad de buhoneros que se encuentran apostados en el centro de la ciudad, convirtiéndola en una anarquía total.