Puerto La Cruz.- Caminar por la calle Venezuela del mercado municipal en Puerto La Cruz genera, entre quienes la transitan, una sensación de estar atravesando el mayor mercado cambiario que funciona de manera ilícita, pero ante la mirada silente de las autoridades policiales.
“Todos sabemos que pagan vacunas a los policías para que los dejen comprar y vender dólares, pero el daño lo están haciendo a todos nosotros porque cada día es más difícil acceder a los soberanos en efectivo debido a que los que compran dólares los acaparan”, denunció Eneida Robles.
La señora, quien acude a diario al mercado municipal en la búsqueda de ofertas para surtir la bodega que recientemente colocó en el porche de su casa, cuenta que con el poco efectivo que llega a su negocio puede adquirir huevos y queso. Pero, califica de insólito ver como los compradores de dólares caminan con grandes cantidades de billetes en la mano sin recibir sanción alguna de las autoridades.
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“En el estacionamiento de la calle Venezuela está una casilla de Polisotillo y también están funcionarios de Polianzoátegui. Ambos cuerpos de seguridad permiten la venta y compra de dólares sin contemplaciones. Se aprovechan de los más necesitados que desconocen en cuánto pueden vender sus divisas”.
Indicó que en el expendio de alimentos porteño los rubros alimenticios tiene tres costos, el precio en dólares, en soberanos en efectivo y por punto de venta, lo que ha comenzado a dificultar la adquisición de algunos rubros por parte de los consumidores que acuden al lugar-
Luis Aguache hacía compras en el área de carnicería y se quejaba porque los comerciantes adecuaban los costos de tal manera que obligan a las personas a conseguir divisas y luego redondean los montos para no dar vueltos.
Lo cierto es que se ha vuelto una costumbre observar a grandes grupos de vendedores informales caminar por los alrededores y el interior del mercado municipal con grandes cantidades de billetes soberanos en la búsqueda de posibles clientes para comprar dólares. Todos tienen el mismo llamado ¡Compro dólares, compro dólares, al mejor precio, tengo billetes grandes y pequeños!.