111 años de la coronación canónica: la principal razón que tienen los devotos de la Virgen del Valle para celebrar este 8 de septiembre. Pero también la intercesión ante Dios por los favores concedidos. Este jueves, los cohetes y galerones despiertan a los creyentes, quienes se esmeran en preparar las fiestas para Vallita
Los hombres católicos también prometen cosas a la Virgen María. Las recitan en silencio cuando nadie los ve. Son marianos. Y, en el oriente venezolano, la advocación de la Virgen del Valle suma miles de hombres devotos, como José Gregorio Álvarez, Emilio Rivera y Juan Zamora.
Ellos le cuentan a El Pitazo sus experiencias de fe en medio de adversidades médicas. Durante la pandemia por el COVID-19 vivieron momentos críticos en los que, aseguran, se favorecieron por la intercesión de la virgen ante su hijo, Jesús.
José Álvarez es párroco en la iglesia Santísima Trinidad y Virgen del Valle en Punta de Mata, municipio Ezequiel Zamora de Monagas. En octubre de 2021 enfermó por tercera vez por el virus; cuando sintió que cerraba su capítulo en la tierra, se entregó a los brazos de Dios: permaneció cinco días inconsciente.
“Mis niveles de oxígeno en sangre eran muy bajos y los médicos no daban muchas esperanzas”, recuerda.
Un niño de 3 años de edad rezó a la virgen por él. Después de orar, le envió un mensaje manifestándole que Dios a través de su madre lo sacaría de ese hueco en el que estaba. Y así, reaccionó.
Ahora, su fe en la virgen es más grande. Este 8 de septiembre es uno de los miles de devotos que celebran los 111 años de la coronación canónica de Vallita.
“Mis niveles de oxígeno en sangre eran muy bajos y los médicos no daban muchas esperanzas”, José Álvarez, párroco Punta de Mata
Fiesta en el oriente
La Virgen del Valle es una advocación mariana venerada en Anzoátegui, Monagas, Nueva Esparta y Sucre, así como en Delta Amacuro y parte de Bolívar. En Zaraza, estado Guárico, también se le venera. La imagen fue traída por los españoles a Cubagua, Nueva Esparta, en 1530.
12 años más tarde, la imagen sobrevivió a un ciclón. Los habitantes la llevaron a una finca en El Valle, donde le construyeron una ermita. Desde entonces se le conoce como la Virgen del Valle. También es la patrona de los pescadores y de la Fuerza Armada.
Este jueves, los cohetes y galerones despiertan a los creyentes, quienes se esmeran en preparar fiestas para Vallita. Este día se canta el cumpleaños, las mañanitas y, en las comunidades más organizadas, se presentan actos culturales. En el estado Anzoátegui, el gobernador Luis Marcano decretó día no laborable.
La iglesia católica tiene actos religiosos y procesiones desde las 8:00 am. En Margarita, estado Nueva Esparta, se espera la mayor movilización de fieles a la basílica porque es el primer año, después de la pandemia, que la Virgen del Valle se reencuentra con sus devotos.
Emilio Rivera, periodista y productor audiovisual, tiene pendiente un viaje a la isla. Se lo debe a la virgen, pues está convencido de que ella lo salvó del COVID-19. “Cuando sentí que ya no podía más, le pedí a la Virgen del Valle que curara a mi mamá y mis hijos, y si podía, a mí”, recuerda.
Desde Caracas, Emilio manifiesta que la culpa por llevar el virus a casa lo hizo ponerse en el último lugar cuando pedía sanación. Una mañana amaneció sin dificultad para respirar y sin malestar. “Por ella estoy vivo”, enfatiza.
“Cuando sentí que ya no podía más, le pedí a la Virgen del Valle que curara a mi mamá y mis hijos, y si podía, a mí”, Emilio Rivera, devoto Virgen del Valle
Los hombres son marianos
Juan Zamora, abogado y productor agrícola, también está convencido de que vive gracias a Vallita tras superar 100 días con el virus. “Un día me rendí y le pedí tanto que, después, agarré un ánimo diferente. Ella me escuchó”, expresa.
Su devoción es de familia. Afirma que el hombre es tan mariano como la mujer y no le da pena decirlo, porque es cuestión de fe: “Siempre me escucha, me lo hace saber. Una vez hubo un verano terrible y en la única parte donde llovió fue hacia donde están mis terrenos y eso lo hizo ella, porque yo se lo pedí”, recuerda.
Para un hombre mariano, todos los días son días de la virgen. “Esta es sólo una fecha especial en la que le regalamos flores y le rendimos honor”, reflexiona.
“Siempre me escucha, me lo hace saber”, Juan Zamora, devoto Virgen del Valle
Este jueves, las autoridades de Margarita esperan que más de 7.000 devotos acudan a venerar a Vallita. En Anzoátegui y Sucre se estima que cientos de pescadores la sacarán a pasear, mientras que en Monagas miles de fieles asistirán a las actividades religiosas para dar gracias, como lo harán José Gregorio, Emilio y Juan.