Maturín.- La presidenta de Gasmaca, Luisana Betancor, dijo que una colilla de cigarro fue la causa de la explosión de las 161 bombonas de gas doméstico en la población de Caño Los Becerros, municipio Piar de Monagas, el 28 de diciembre. La afirmación fue hecha por Betancor este 14 de enero durante el programa radial de la gobernadora Yelitze Santaella.
“De acuerdo a las evidencias recolectadas, se determinó que la fuente de ignición o punto de incendio que causó el fuego y posterior explosión de cilindros haya sido producto de una persona que se encontraba fumando y arrojó la colilla de cigarro encendida al pavimento donde se encontraban acopiados los cilindros y presencia del GLP (Gas Licuado de Petróleo)”, explicó.
Betancor indicó que el hecho ocurrió una hora después de que los empleados de Gasmaca entregaron 198 cilindros de gas doméstico en Caño Los Becerros. Ese día, del camión se bajaron 167 bombonas de 10 kilogramos, 14 de 18 kilogramos y 17 de 43 kilogramos en el centro de acopio.
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Fuga de gas alertaron los vecinos
Betancor no hizo mención a la fuga de gas doméstico que salía de los cilindros, denunciado el pasado 29 de diciembre por los habitantes de la zona. Los familiares de los heridos aseguraron que habían alertado sobre un fuerte olor a gas, pero que los empleados hicieron caso omiso y se marcharon del lugar.
Tras la explosión de los cilindros, cinco personas ya han fallecido. Las víctimas son dos adultos y tres menores de edad. El deceso más reciente ocurrió este 13 de enero en el hospital de Maturín donde otras 10 personas siguen hospitalizadas con quemaduras de tercer grado en gran parte de su cuerpo.
Sobre la explosión ocurrida en el sector Costo Abajo, parroquia Boquerón de Maturín, Betancor dijo que la causa fue una chispa al encender un bombillo. Señaló que había una fuga de gas doméstico y eso causó el estallido. “El cilindro quedó intacto, se le hicieron las pruebas de presión y no explotó, pero lamentablemente hay tres heridos”, indicó.
Los heridos de ese accidente están hospitalizados en el Hospital Manuel Núñez Tovar. El niño de 5 años es quien tiene una condición delicada. Médicos explicaron que tiene quemaduras de tercer grado en 95% de su cuerpo. Distintas organizaciones piden ayuda para su tratamiento médico.