Cumaná.– Las aguas residuales colapsaron en el edificio donde funciona la Escuela de Enfermería del Núcleo de Sucre de la Universidad de Oriente (UDO). La denuncia la realizaron un grupo de estudiantes a través de una llamada a El Pitazo el jueves 3 de septiembre, quienes aseguraron que el pasado 13 de marzo, fue la última vez que recibieron clases en ese lugar.
Los bachilleres temen que estos espacios se terminen de deteriorar por falta de mantenimiento, y por esta razón exigen al presidente de la Fundación Regional para la Salud del estado Sucre (Fundasalud), doctor Pablo Terán, y al director del Hospital Universitario Antonio Patricio de Alcalá (Huapa), Luis Montaño, que envíen un personal para que realice las labores de limpieza en las áreas verdes, salones y pasillos de esta estructura.
El presidente del Movimiento Universitario de Enfermería (MUE) de la UDO Sucre, Asdrúbal Hernández, señala que los jardines de la Escuela de Enfermería se encuentran totalmente inundados de aguas contaminadas y esto representa un riesgo potencial para la salud pública. “Son criaderos de distintos vectores y agentes patógenos causantes enfermedades endémicas y epidemiológicas”, agregó.
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El representante del MUE indicó que las condiciones actuales en las que se halla el edificio de 6 pisos, ubicado dentro de los espacios del hospital de Cumaná, no están aptas para que los alumnos regresen a sus actividades académicas, cuando se termine la pandemia.
Al reclamó se unió Ivonne Angulo, estudiante de la carrera de enfermaría en la UDO Sucre, quien detalló que a pesar que los salones donde reciben las clases se encuentran ubicados en los pisos 5 y 6 del edificio, la comunidad universitaria esta vulnerable y siente miedo de contagiarse con una enfermedad, debido al estado de abandono en el que se encuentra esta estructura.
La vocera estudiantil asegura que de no realizarse las reparaciones y mantenimiento en la edificación donde funciona la Escuela de Enfermería, se van a ver afectados 350 estudiantes, aproximadamente, y unos 30 profesores. Además del personal de vigilancia de la UDO que permanecen en la planta baja.