El Tigre.- Han transcurrido siete días desde que Fátima Galindo reportó la pérdida de sus cuatro hijos de 1, 6, 8 y 10 años. Desde entonces, agentes del Cuerpo de Investigaciones Científicas, Penales y Criminalísticas (Cicpc), efectivos castrenses y bomberos se encuentran tras sus pistas.
La desaparición de los infantes ocurrió pasadas las 4:00 de la tarde del domingo 21 de noviembre. Fátima había salido de su humilde hogar, ubicado en el sector Andrés Bello de El Tigre, zona sur de Anzoátegui, y junto a sus cinco hijos, incluyendo el mayor de 13 años de edad, fue a buscar leña para cocinar.
Cuentan habitantes de la localidad que mientras la joven madre juntaba la leña con sus hijos comenzó a llover, por lo que ésta decidió enviar a los más pequeños de regreso a su hogar; no era la primera vez que lo hacía, los niños se conocían la ruta de regreso.
Estaban en una zona boscosa y, según voceros del cuerpo detectivesco, los infantes debieron haber tardado 15 minutos aproximadamente para llegar a la casa de zinc donde habitaban junto a su madre, pero eso nunca ocurrió, ningún vecino los vio llegar al lugar.
Fátima se había quedado junto a su hijo de 13 años de edad juntando la leña y cuando llegaron a su hogar no estaban los infantes. Así comenzó la angustiante búsqueda de los cuatro pequeños de quienes aún no se tienen pistas.
Fue la madre de los cuatro hermanitos quien acudió a las oficinas del Cicpc en El Tigre para denunciar el hecho. Ella se encuentra en el cuerpo detectivesco desde entonces ofreciendo declaraciones que puedan apuntar a la ubicación de los infantes.
A medida que iban transcurriendo las horas y los días, expertos del Cicpc enviados desde Caracas se fueron sumando a las labores de rescate, pero pese al despliegue policial no hay rastros de los niños.
A las labores de búsqueda se le sumó la inclusión de drones, con los cuales han sobrevolado la zona boscosa, pero no han dado con algún rastro o evidencia que pueda asomar la ubicación de los cuatro hermanitos. Desde este viernes, en horas de la tarde, los detectives han ampliado la búsqueda a otras localidades vecinas.
Habitantes del sector Andrés Bello han asegurado que los infantes siempre estaban junto a su madre y ésta en la constante búsqueda de alimentos para mantener a sus cinco hijos, ya que vivían en condiciones de extrema pobreza.