Por: Programa de Formación de Nuevos Periodistas
Caracas.- Fieles a la tradición, los habitantes del pueblo de Cantaura, en Anzoátegui, se reunieron a las afueras de la iglesia para celebrar la bajada de la Virgen de la Candelaria. Un ambiente de fiesta, alegría y devoción se sentía en el homenaje católico.
El rito consistió en un rezo del rosario de los misterios gozosos, lo que dio paso a la bajada de la imagen de la virgen, que vestía de blanco y fue decorada con rosas blancas y flores rosadas.
Siguió una procesión hasta la plaza Bolívar y de regreso, hasta que las campanadas de la iglesia anunciaron el comienzo de la misa, oficiada por el obispo invitado de la diócesis de El Tigre, José Romero Barrios, quien expresó gran gratitud por haber sido elegido. La celebración fue acompañada por un grupo musical que deleitó a los asistentes con temas como Ave María y Niño Lindo.
Brillantes rosarios y cadenas con medallas adornaban el cuello de muchos de los asistentes, y algunos niños vestían con camisas blancas con la imagen de la virgen.
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Jóvenes acompañan el evento
Entre los asistentes había personas de todas las edades, pero resaltaron en la multitud grupos de jóvenes con chalecos naranja, quienes participaban en la organización del evento como parte del grupo de feligreses Cordón de la Fe encargándose de resguardar la imagen de la virgen.
Para Gillian, joven de 23 años que coordina el Cordón de la Fe, la bajada de la virgen es un momento muy especial en el que puede servir y expresar su devoción. “Es indescriptible lo que uno como joven siente al custodiarla”, dijo a El Pitazo Gillian, quien agradece a su madre haberle transmitido la fe hacia la virgen.
También expresó gran alegría al ver que cada año se suman más personas de distintas partes del estado a la celebración y reconocen a la Virgen de la Candelaria como patrona del estado Anzoátegui.
“Con María, peregrinos de la esperanza” es la frase que acompaña este 2025 las festividades, inspirado en el lema del año jubilar.
La bajada de la imagen da inicio al mes de fiesta patronal en honor a la virgen, que concluye el 2 de febrero, día de conmemoración internacional a la santa y de gran júbilo para los anzoatiguenses.
En Cantaura es una tradición celebrar y honrar a la Virgen de la Candelaria, sin embargo, el acto de la bajada de la imagen comenzó en el año 2015, por iniciativa de un grupo de jóvenes, entre ellos el hoy presbítero Fernando Milano y el seminarista Carlos Guacare.
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