La personalización de las campañas electorales ha puesto la fuerza en la imagen de los candidatos por encima de la ideología, partido o programa de gobierno. En tal sentido, el mensaje electoral está más vinculado a los atributos personales del candidato que a lo que representa su plataforma, propuesta gubernamental u organización partidaria.
Por: Radamés Graterol
El término imagen proviene del latín «Imago» y del griego «Eikon» que significa icono o retrato. Ampliando un poco su significado «Imago» simboliza a la representación y la reproducción en tanto que «Eikon» a la semejanza.
Partiendo del origen de esta palabra, la doctora en Comunicación política Sandra Orejuela, señala que “la imagen de una persona es una representación física y, por tanto, visual que representa su propio ser. Es como el sello o la marca de nuestra identidad personal, a través del cual nos damos a conocer en el mundo y manifestamos nuestro mundo interior. En fin, la imagen pública equivale, por tanto, a la opinión y consideración general de los otros.”
La imagen ideal de un político
La personalización de las campañas electorales ha puesto la fuerza en la imagen de los candidatos por encima de la ideología, partido o programa de gobierno. En tal sentido, el mensaje electoral está más vinculado a los atributos personales del candidato que a lo que representa su plataforma, propuesta gubernamental u organización partidaria.
Para el politólogo italiano A.Foglio, un político debe proyectar entre otras características: “entusiasmo, presencia, inteligencia, apertura de mente, innovación, ejercicio constante de la autocrítica, imaginación, modestia, simpatía, empatía, iniciativa, memoria, voluntad, salud, lealtad, coherencia, gentileza, sociabilidad, capacidad de persuasión, sentido de observación, capacidad organizativa, sentido crítico, resolución, capacidad de influir con justicia y argumentaciones puntuales.”
Además considera Foglio, que un buen político para ser líder tiene que saber comunicar, lo cual implica: hablar, escuchar, visitar, escribir, leer, divulgar, decidir, informarse, proyectar, criticar y convencer correctamente.
¿Ser o parecer?
Ahora, qué es más importante en el tema de la imagen ¿Ser o parecer? Para referirse a este asunto en materia electoral varios estudiosos consideran que la imagen tiene diversas dimensiones, que se resumen en las siguientes: lo que es el candidato, lo que proyecta el candidato y lo que perciben los votantes del candidato. Basados en esto según Maarek, “la imagen del político es una construcción tanto en la emisión como en la recepción, y sólo toma su forma real, cuando ha sido percibida e interpretada por el individuo receptor.” En pocas palabras un buen aspirante tiene que ser lo mejor posible, y esforzarse en parecer el tipo ideal o modelo que desean los potenciales votantes sin desvirtuar su autenticidad.
¿Qué se espera de un candidato?
Las investigaciones de los cientistas políticos Miller, Martin, Oksana y Kinder aseveran que son muchos los elementos tomados en cuenta por los electores a la hora de evaluar a su candidato; pero de forma breve señalamos estos aspectos son: la competencia, entendida como esa serie de atributos que hacen idóneo al candidato para entrar en la lid política: inteligencia, estudios, experiencia profesional o de gobierno, dotes de mando y su grado de cultura. La integridad que implica la solvencia ética y moral para asumir el cargo. La fiabilidad que describe cualidades como responsabilidad, dedicación; el carisma, que se entiende como liderazgo, capacidad de acercamiento con la gente, comunicación; y, por último, la apariencia física o rasgos sociodemográficos como: edad, habilidades retóricas, religión, etc.
Los candidatos a las primarias
Para el momento de escribir éste artículo, se habla de que unas 40 personas han asomado la posibilidad de participar en elecciones primarias ―respetando a cada uno de ellos porque entiendo que no hay candidato perfecto― tengo que aseverar que me sobran dedos de una mano para contar a los que se acercan medianamente al modelo de candidato que aspiramos los venezolanos.
El reto que tienen los candidatos entonces es investigar, estudiar, entrenar, comunicar y recorrer a la brevedad, para tener alguna opción de figurar o ganar las elecciones primarias.
Ojalá que por encima de la moda de elegir en el mundo: payasos, narcisistas y cómicos vacíos, impere el pensamiento de R. Scher “Los ciudadanos quieren que los políticos encarnen las mejores virtudes, para que los lidere”.
RADAMÉS GRATEROL | @radamesgraterol
Politólogo venezolano egresado de la Universidad Central de Venezuela. Profesor universitario, ex alcalde y consultor político.
El Pitazo no se hace responsable ni suscribe las opiniones expresadas en este artículo.
Escriba al correo [email protected] para algún comentario sobre nuestras publicaciones.