Por Odalin Martin
1917 es una cinta dirigida por Sam Mendes y de la cual seguro ya has escuchado hablar muchísimo. Ha ganado una gran cantidad de premios esta temporada y los críticos internacionales la han alabado por sus características técnicas, de las que les hablaré más adelante.
Sam Mendes es un director que tiene en su repertorio películas como American Beauty (1999), Skyfall (2012), 007: Specter (2015), Soldado Anónimo (2005), entre otras maravillosas producciones; sin embargo, esto nos indica que Mendes es un hombre que ama el cine en su más pura esencia. Todo el aprendizaje que ha tenido durante su carrera lo expresa en 1917.
1917 cuenta la historia de dos jóvenes soldados británicos que son enviados a cumplir una misión que deben llevar a cabo en solamente 24 horas durante la Primera Guerra Mundial.
Así de sencilla es la premisa de esta película, es el viaje del héroe y esto es algo que no es nuevo en el cine; lo hemos visto en una gran variedad de cintas, como por ejemplo la trilogía de El Señor de los Anillos.
El Viaje del Héroe es una fórmula que se usa para crear una historia y se basa en la misión que tiene un personaje específico. Todas estas características hacen que 1917 sea más introspectiva en cuanto a la guerra se trata, porque solo vamos con una única misión.
Llegados a este punto, seguramente ustedes se preguntarán: si es una premisa tan sencilla, con una fórmula tan básica ¿qué es lo que hace especial a 1917? La respuesta a esto está en el nivel técnico que usó Mendes para desarrollarla: usó la técnica del plano secuencia, que se basa en una toma sin cortes por un periodo amplio. Esto no significa que la película no tiene cortes, pero Mendes les puso tanta atención y esmero que por momentos nos hace dudar que esos cortes existían en su película.
Otro de los aspectos en donde resalta 1917 es en la edición y esto –obviamente– va muy de la mano con el plano secuencia. Para lograr un plano secuencia con una edición tan sutil y tan bien hecha se requiere de un equipo perfeccionista, con un ojo al detalle muy especial.
Para mí, uno de los aspectos más interesantes y maravillosos de esta cinta es el diseño de producción y la fotografía. El empeño de Mendes en lograr una película hermosa es notable: cada escena es única y con detalles perfectos; los elementos del entorno complementan la historia y los colores, a pesar de usar tonos muy fríos en la mayoría de las escenas, juegan con las emociones y sientes la desolación y la tristeza de los vestigios de una guerra.
La música… oh, la música, un elemento especial en cualquier producción. 1917 tiene una música increíble e impecable, de eso no hay duda, pero no está del todo bien usada. En lo personal, sentí que la música me preparaba para sorprenderme, para esperar algún acontecimiento importante y una vez que bajaba el volumen ya estábamos a salvo, eso lo considero un error en la cinta. La música debería acompañar al personaje, a la historia y a la audiencia, mas no avisarle que algo va a pasar, porque se pierde la conexión con el evento que está por venir.
Ahora tengo que hablarles de lo que para mí es el punto más flojo de esta cinta: el guión. A pesar de ser una película alabada por el público y por la crítica, su falla principal está en el guión, sobre todo en el desarrollo de nuestros dos personajes William Schofield (George MacKay – Pride, 2014) y Tom Blake (Dean-Charles Chapman – Juego de Tronos, 2013 a 2016), pues entre ellos no está bien establecida la relación y esto desconecta un poco de los momentos más clave de la película. Por otro lado, el guión falla mucho en la calidad de los diálogos; por momentos los sientes irrelevantes y aburridos, cosa que definitivamente no debería pasar.
1917 se presenta como la gran favorita para llevarse el Oscar 2020 como Mejor Película, pero no es su única nominación:
- Mejor Película
- Mejor Dirección – Sam Mendes
- Mejor Guión Original
- Mejor Fotografía
- Mejor Diseño de Producción
- Mejor Vestuario
- Mejores Efectos Visuales
- Mejor Música
- Mejor Sonido
- Mejor Edición de Sonido
Definitivamente, con esas 10 nominaciones y la gran alabanza de la crítica es posible que 1917 sea la gran ganadora de la noche. Yo quiero invitarlos a que vayan a su sala de cine favorita a ver la cinta de Sam Mendes, que hizo honor a su abuelo, quien vivió los acontecimientos de la Primera Guerra Mundial.
Recuerden que la experiencia que te brinda el cine, con sus pantallas y su sonido, no tiene precio y nos hace valorar mejor el trabajo de todas las personas que hicieron esta película posible.
Odalin Martin es escritora, crítica de cine y presentadora de televisión. @OdaMM