Por: Luisa Pernalete
Este domingo, 17 de julio, en Venezuela se celebra el Día del Niño, una buena oportunidad para recordar la situación de orfandad en la que viven nuestros niños y niñas, y la necesidad urgente de defender sus derechos, de insistir en la necesidad de protegerlos de manera integral de todo tipo de violencia y de que puedan tener un nivel de vida adecuado, tal como lo establece el Artículo 30 de la LOPNNA.
Buen momento para recordar también que los garantes de los derechos de los niños son tres: la familia, la sociedad y el Estado, último garante, al que le corresponde el diseño y aplicación de políticas públicas, el que administra los recursos públicos y debe aplicar la justicia cuando se amerite.
Además, según la LOPNNA, Artículo 91, los adultos tenemos deber y derecho de denunciar amenazas y violaciones de los derechos de los niños, niños y adolescente (NNA). Eso significa que no podemos ser indiferentes frente a cualquier amenaza o violación de sus derechos, aunque el niño o la niña a que se le violen no sea nada mío. Hace unos días, por ejemplo, entré en una frutería y vi una escena que me indignó: una señora joven estaba pegándole en la cara a una niña de unos 6 o 7 años, la cual, como era de esperarse, lloraba. Al ver aquello, indignada reclamé a la señora su acción, y ella me dijo que era su mamá y tenía derecho apegarle. Le dije que nadie tenía derecho a pegarle a un niño, ni las madres. No sé si convencí a la señora o simplemente ante mi reclamo dejó de pegarle. Tenía el deber y el derecho a intervenir.
La escuela, por supuesto, tiene la obligación de defender los derechos de los niños y niñas, puesto que le corresponde educar para la ciudadanía, enseñar a convivir ―y educar en Derechos Humanos ayuda a convivir―, le corresponde, al igual que a la familia, que los niños conozcan sus deberes y sus derechos, para que los puedan defender. Lo cual está también contemplado en la LOPNNA, Art. 86, Derecho a defender sus derechos.
Así que hay que buscar estrategias diversas y creativas para enseñar a los niños sus derechos. Y dado que los venezolanos nacemos cantando, hacer estrofas, ya sea que los hagan los maestros o mejor si enseñan a hacerlo a los alumnos, es para nosotros una vía buena para enseñar estos derechos. No se les olvidarán. Letras como estas, que comparto a continuación:
La familia y la escuela/ deben actuar como aliados/ para que los niños tengan / derechos garantizados//
Derecho a la Educación/ y a tener documentos / eso para muchos niños / es realmente un gran tormento//
Tienes derecho al buen trato/ y a ser bien alimentado/ a servicios de salud/ todos deben ser respetados //
Si en tu barrio no hay escuela / no sitio para recreación/ anda y busca compañeros / y arma tu organización //
La LOPNNA dice tienes / el derecho de opinar/ también el de organizarse / y el de participar//
También tienes el deber / a ser siempre protegido/ contra el abuso sexual/ y debes ser defendido//
La idea es ir comentando los derechos y reforzarlos con las estrofas. Se pueden componer en equipo, se pueden recitar, se pueden cantar. También se pueden hacer sociodramas, hacer un poco de teatro pues. También es importante que conozcan rutas para hacer denuncias, o a quién recurrir en la escuela o en la comunidad, o en la ciudad, pues:
Para defender derechos/ están las defensorías/ si no sabes dónde están/ te informo de asesorías//
Se supone que en tu escuela / deben la LOPNNA enseñar/ conocer bien tus derechos/ para por ellos luchar//
Y recordemos:
Defender estos derechos / no es cosa de un solo día/ los conoces, yo te ayudo/ eso te dará alegría.//
LUISA PERNALETE / @luisaconpaz
Educadora en zonas populares por más de 40 años. Utiliza el sentido del humor como herramienta pedagógica | El Pitazo no se hace responsable ni suscribe las opiniones expresadas en este artículo.
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