Cuando faltan cuatro días para el 22 de octubre, tenemos tres certezas:
- La primaria de la oposición se realizará el domingo, una seguridad que se incrementó tras la firma de los acuerdos en Barbados
- María Corina Machado ganará de acuerdo con los datos de las encuestadoras
- La triunfadora está inhabilitada y así seguirá hasta nuevo aviso. El mensaje de Jorge Rodríguez fue muy claro. El oficialismo no levantará las inhabilitaciones, aunque tenemos bemoles, como la sentencia que expresó el subsecretario Brian Nichols este miércoles en entrevista con NTN24, quien condicionó que EE. UU. cumpla con los acuerdos, al hecho de que el gobierno de Maduro levante las inhabilitaciones y libere a los presos políticos
La duda fundamental que persiste hasta este momento es cuántas personas asistirán a las mesas de votación que funcionarán dentro y fuera de Venezuela. Ya lo comentamos en el anterior artículo, citando al candidato César Pérez Vivas, quien en entrevista con El Pitazo destacó que llegar a un millón de votos será un éxito, sobre todo en un país con 8.000.000 millones en la diáspora y 2.000.000 de migrantes internos, entre otros factores.
Cifras más optimistas apuntan a una participación de 1.500.000 electores. Esta cantidad es la mitad de los 3.000.000 que votaron en las primarias de 2012, en un país con otras condiciones y partidos políticos que movieron sus maquinarias para respaldar a candidatos a gobernaciones y alcaldías.
Cuando faltan cuatro días, algunos ciudadanos dudan en ir a votar. Un porcentaje de cerca de 34 %, según la última encuesta presentada por Félix Seijas, presidente de Delphos, manifiesta no estar motivado a votar o que jamás votaría en la primaria de la oposición. A este grupo es imposible de convencer. Entre ellos se encuentran los más duros simpatizantes del oficialismo, los que se abstienen de ir a votar hasta en la elección de una reina de Carnaval y los venezolanos desilusionados, algunos de ellos aún a la espera de soluciones mágicas.
Un 23.2 % dice que quizás votaría. En este porcentaje tal vez se encuentran aquellas personas que entre sus argumentos tengan, por ejemplo, el para qué votar si María Corina Machado igual va a ganar y que luego de triunfar será inhabilitada. Seguro también están los que ni siquiera quieren votar por la candidata de Vente Venezuela, pues no simpatizan con su candidatura.
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Para ellos van estos argumentos del porqué votar el domingo 22 de octubre en la elección primaria de la oposición en Venezuela:
- Partamos de la hipótesis de que se cumplan los acuerdos, el Consejo Nacional Electoral permite el registro de venezolanos dentro y fuera del país y se respeta el cronograma electoral para que se realice una elección presidencial o general de julio a diciembre de 2024. La candidata o candidato de la oposición partirá con una fuerza de votos si en la primaria participan 1.500.000 electores. Será un impulso inicial que puede encender la dormida participación política de la ciudadanía y facilitaría la transición política por los votos. Ahora, si la votación del domingo es de menos de un millón, el oficialismo tendrá los argumentos para atacar los resultados y al ganador y dentro de los partidos de oposición habrá quienes vean una oportunidad de desconocer el mandato de la primaria y apuntar a un candidato de consenso.
- ¿Por qué votar si al final María Corina será inhabilitada? La Plataforma Unitaria, aunque algunos miembros pueden estar arrepentidos, la Comisión Nacional de Primaria y la misma candidata, apoyada por algunos de sus competidores, insistieron y lo lograron. Se mantuvieron firmes en permitir la participación de los inhabilitados. Que Capriles y Superlano se retiraran es otro tema. Pero la candidata de Vente Venezuela ganará y seguirá inhabilitada. Pero alerta. Con su victoria seguirá en el juego y por más que EE. UU. necesite el petróleo de Venezuela, demos por cierta las palabras del subsecretario Nichols. Para que EE. UU. cumpla su parte del acuerdo, Maduro debe liberar presos políticos y levantar las inhabilitaciones.
- Finalmente, supongamos que el factor petróleo pesa tanto que el subsecretario tenga que tragar grueso y ver que María Corina sigue inhabilitada, aunque ella insista de todas las maneras posibles en competir en 2024.
Hoy día ella tiene una clara conexión con el electorado. Podemos comparar su vínculo con los votantes como los alcanzados por CAP II y por Hugo Chávez. Esto la convertiría en el portaviones y en la gran electora de una candidatura unitaria de otro líder, a quien debe levantarle la mano María Corina.
En ese escenario, es fundamental saber quién queda en segundo lugar. Por eso la importancia de que los electores voten para aspirar a que esa o ese escolta de María Corina, sea candidateable.
Claro, ciertas condiciones aplican. Debe ser un candidato de consenso, pero al que María Corina le levante la mano. Si la Plataforma Unitaria insiste en un aspirante como Manuel Rosales o el mismo Henrique Capriles, volverá la desilusión del electorado y se facilitará la división de la oposición que favorecerá al candidato del oficialismo, que no es seguro que sea Nicolás Maduro.
El lunes amanecerá y comenzaremos a ver una nueva etapa de esta historia y tal vez una nueva versión de María Corina Machado.