Punto Fijo.- Un grueso número de trabajadores petroleros y jubilados tomaron las calles de Punto Fijo, en la Península de Paraguaná, para denunciar las pésimas condiciones laborales a las que están sometidos, así como la falta de atención en el área de salud y la falla del pago del fondo de pensiones.
Los petroleros caminaron desde el Banco Provincial, en el Centro de Punto Fijo, hasta la sede del Diario Nuevo Día, único medio impreso de la región, ubicado en la avenida Jacinto Lara. En las afueras dieron una rueda de prensa, donde piden la destitución del Presidente de Pdvsa, Manuel Quevedo, y de Wil Rangel.
Segundo Manaure, jubilado de la industria petrolera, denunció que su compañero Amilcar Yaraure falleció la noche de este martes 22 de octubre en espera de una operación, y así como él están muchos jubilados, esperando una respuesta para poder optar al seguro clínico que debe garantizar la industria petrolera. “Le damos un aplauso de pie a nuestro compañero. Aquí estamos luchando por nuestras necesidades, que bien pensamos que a esta edad, luego de más de 30 años de servicio, nuestra vejez la pasaríamos en paz y descansando, pero lo que estamos es pasando hambre, miseria y necesidades”, lamentó.
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Denunció que no les otorgan el dinero del fondo de pensiones que pagaron durante toda su vida, a pesar de ser un dinero propio que reunieron y pagaron todos los meses. “Esos reales son de nosotros. No estamos pidiéndoles nada; nosotros pagamos esa plata y es de nosotros”.
Recordó que hubo un compromiso de pago, pero nunca se cumplió, a pesar de que cada semana acuden al edificio administrativo los representantes de la Asociación de Jubilados de la Industria de Paraguaná (Ajip).
Por su parte, Yonny Hurtado, secretario del Comité Unitario de Personas con Discapacidad del Complejo Refinador de Paraguaná, dijo que las malas condiciones laborales incluyen a los trabajadores activos, al no tener comida decente, no tener el seguro clínico y tener que llevar a sus hijos y familiares al hospital Doctor Rafael Calles Sierra y no contar con los implementos de seguridad necesarios.
“Poco a poco y desde 2015 nos han ido quitando nuestros beneficios y hoy, luego de cuatro años, vemos como las clínicas de la localidad no nos quieren atender por la cuantiosa deuda que tiene Pdvsa. Aquí lo que está pasando es que a nosotros nos están mandando al Calles Sierra y quedamos sorprendidos de la cantidad de personas fallecidas que tenemos, jubilados y activos”, lamentó.
Dijo que como medida están creando el Frente Nacional de Defensa a la Salud y la Vida. “Nosotros estamos dispuestos a buscar una forma de denunciar ante la Fiscalía como culpable de lo que está pasando a Manuel Quevedo y a Wil Rangel como traidor”.
Jorge Boscán, secretario general del Sindicato Simbomar, de Pdv Marina, explicó que tanto jubilados como activos están pasando por la peor situación que ha tenido Pdvsa y por ello se emprendió una lucha nacional desde oriente hasta occidente para hacer frente a las violaciones de todos los derechos de los trabajadores, principalmente sobre el sistema de salud.
“Hoy los trabajadores y jubilados estamos desamparados por culpa de una política corrupta del sector gerencial de la industria petrolera. Desde Falcón pedimos la salida inmediata de Manuel Quevedo, e inclusive la del superintendente corporativo, que también es militar, por las políticas erróneas que han llevado a cabo”.
Aseguró que los trabajadores y jubilados están pagando toda la corrupción que hay en el sistema de salud y el fondo de pensiones, un dinero que pagaron todos los trabajadores. “Van más de 200 trabajadores en todo el país que se han muerto esperando su dinero”, lamentó.
Expresaron que continuarán en la calle, pese a las persecuciones por parte del Servicio Bolivariano de Inteligencia Nacional (Sebin), cuyos funcionarios dieron varias vueltas en camionetas oscuras y fotografiaron a los trabajadores protestantes.