El cultivo de papa, cebolla, tomate, pimentón, cilantro, perejil, melón, lechosa y piña, previsto para la segunda quincena de noviembre, en cinco de los nueve municipios del estado Lara –Jiménez, Crespo, Torres, Iribarren y Urdaneta– está en riesgo por el colapso de las vías rurales después de las lluvias registradas el 12 de noviembre.
Los pueblos agrícolas Moroturo, Siquisique, Quebrada Arriba, San Miguel, Quebrada de Oro y Rincón Hondo quedaron incomunicados por los desbordes de quebradas y deslizamientos de tierra en las carreteras, explicaron tres fuentes consultadas por El Pitazo el 13 de noviembre. También reportaron daños en predios de Tamaca y la parroquia Aguedo Felipe Alvarado de Iribarren.
Los productores no tienen cómo movilizarse hasta las ventas de insumos o estaciones de servicio para buscar insecticidas, fertilizantes y combustible para acondicionar la tierra o encender las maquinarias.
“Las lluvias mejoran el suelo, pero estas lluvias dañaron las pocas vías que tienen un abandono de ocho años. Ningún alcalde o gobernador de Lara volvió a invertir en maquinarias para mejorar las vías. Nunca previeron ayudar al productor y a las personas que viven en el campo”, declaró el técnico agropecuario Lorenzo Monasterios sobre el estado de las carreteras rurales en la entidad.
Producción disminuirá
En 2019, Lara aportaba 48% de la producción nacional de cebollas y 29% de la producción nacional de tomate, según cifras del Plan País. El cultivo de estos y otros ocho rubros disminuirá para el ciclo de siembra que arranca el 15 de noviembre por las limitaciones que tienen los productores para movilizarse desde los predios.
“Con las vías malas y sin combustible no habrá posibilidad de que se prepare el trabajo de tractores, motobombas ni los vehículos que llevan los productos e insumos al campo”, sostuvo Monasterios.
“Lara tiene alrededor de 300.000 hectáreas aptas para la producción agrícola en todo el estado. Yo no creo que en esta oportunidad en las 25.000 que tiene el Valle de Quíbor se vayan a cultivar más de 500 hectáreas (de cebolla, papa, tomate, pimentón y plántulas)”, agregó el técnico que estima que la principal zona agrícola de Lara producirá 100 hectáreas menos que el año anterior. Por cada hectárea de cebolla no sembrada se pierden dos puestos de trabajo en el campo.
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Moroturo en emergencia
El presidente de la Asociación de Pequeños y Medianos Criadores del municipio Urdaneta, Antonio Faneites, señaló que la parroquia Moroturo está en emergencia por el desborde de la quebrada de Urama que cerró la única vía de acceso que conduce a los pueblos Moroturo, Caño Rico y El Coroto y El Tesoro, entre otros, en donde cultivan maíz, lechosa, melón, cebolla y caraotas, además crían ganado.
“No hayamos por dónde pasar, ninguna autoridad ha venido. Sólo están atravesando la vía camiones 350 a su propio riesgo”, comentó.
De acuerdo con el presidente de la Asociación Venezolana de Criadores de Ganado Carora (Asocrica), Nicanor Oropeza, Iribarren es el municipio más afectado por las lluvias, seguido de Torres y Urdaneta.