Barquisimeto.- El aire acondicionado del área de quimioterapias del Hospital Universitario de Pediatría Agustín Zubillaga (Hupaz) de Barquisimeto, la capital de Lara, está dañado desde hace más de dos semanas, denunció este martes, 18 de enero, un grupo de madres de niños con cáncer recluidos en el centro de salud.

Los niños corren el riesgo de contraer infecciones sin el aire acondicionado en funcionamiento en el espacio que recibe un promedio de 20 a 25 pacientes por día, advirtió a El Pitazo Yarianny Mendoza. Su hijo fue diagnosticado con leucemia linfoide aguda a comienzos de 2021 y es paciente del servicio de oncología del Hupaz desde entonces.

«En estos momentos hay once niños hospitalizados para recibir quimioterapia, aparte de los que van por el tratamiento y vuelven a sus casas. Hacemos un llamado a la directiva (del hospital) para que nuestros hijos puedan tener una mejor estadía. Ellos se fastidian y lloran por el calor y no podemos abrir las ventanas en las habitaciones para que entre brisa, están inmunosuprimidos», agregó.

Un trabajador del área declaró a El Pitazo, en condición de anonimato, que el aire acondicionado del servicio de oncología del Hupaz no sirve desde hace tres años, con excepción del área de quimioterapias que mantuvo sus equipos operativos hasta principios de enero. La información fue corroborada por la activista Yennifer Peña, directora de La Movida Positiva, una ONG que asiste a niños con cáncer en el estado Lara.

Los familiares alertaron que desconocen cuándo serán reparados los equipos porque el personal de mantenimiento les pidió un tiempo de espera. La directora del Hospital Universitario de Pediatría Agustín Zubillaga, Miriam Lucena, declaró a El Pitazo vía telefónica que no tiene conocimiento de esta situación. «Cada unidad del hospital tiene un jefe de servicio que se encarga de notificar las averías para llamar a los técnicos y no he recibido ningún reporte», aseguró.

Gastan 30 dólares diarios en insumos

En el servicio no solo hay fallas en la planta física. La escasez de insumos y enfermeras que desencadenó protestas de familiares y personal de salud en noviembre de 2021 continúa, sostuvo Mendoza. Los familiares gastan 30 dólares diarios en insumos que no hay en el centro de salud infantil que recibe pacientes de Lara, Portuguesa, Barinas, entre otros estados.

«Aquí nosotros debemos traer desde el algodón hasta las inyectadoras, los yelcos, macrogoteros, adhesivos y obturadores. El hospital tampoco nos está dotando de solución dextrosa que se utiliza para hidratar a los niños. Cada paciente necesita como mínimo cuatro frascos de solución por día y uno vale casi cinco dólares», comentó. A la par, denunció que hay apenas dos enfermeras para cumplir los tratamientos de los pacientes hospitalizados y administrar las quimioterapias por turno.

Los padres venden sus enseres y buscan ayuda en fundaciones para completar los tratamientos de sus hijos, reiteró la entrevistada. La entrega de medicamentos para quimioterapias a cargo del Instituto Venezolano de los Seguros Sociales (Ivss) también puede fallar y los padres también deben reunir para adquirir estos fármacos. En una sesión pueden requerir de 350 a 2.500 dólares en medicamentos de alto costo.

Según cifras de la ONG La Movida Positiva, en Lara había un censo de 137 niños con cáncer tratados en el Hospital Universitario de Pediatría Agustín Zubillaga y el Hospital Pastor Oropeza, pero al cierre de 2021, 57 pacientes abandonaron las quimioterapias porque el Estado no garantizó la dotación de medicamentos de alto costo y los padres no tenían los recursos para cubrir los gastos o movilizarse desde municipios y estados foráneos.