Por Crónicas de Chile
Santiago de Chile.- Mirla, César y Simón tienen en mente abrir una pastelería y distribuir sus postres por porciones en Buin, comuna de la Región Metropolitana perteneciente a la provincia de Maipo, Chile.
El sueño de estos tres venezolanos que vivían en Puerto Píritu, estado Anzoátegui, se acerca a ser una realidad tras casi dos años de impulsar su emprendimiento de repostería creativa.
Fue el 27 de junio de 2020 que nació Postres Happy (@postres.happy). Mirla y César, madre e hijo, y Simón, amigo de la familia, temían sufrir el impacto de la pandemia. «Una noche nos preguntan si nos atrevíamos a hacer una torta decorada de chocolate con nutella. Dijimos que sí y nuestra sorpresa fue que luego nos encargaron dos más. A esa torta la bautizamos como Súper Nutella Happy», detalla César.
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Mirla, quien nació en La Guaira, estado Vargas, se mudó tras el deslave a Píritu. Allí realizó cursos básicos de repostería y el 10 de mayo de 2019 viajó con su esposo a Buin, donde se reencontró con César y otro de sus tres hijos.
Gracias a cursos de repostería en la Municipalidad se perfeccionó en la elaboración de postres. «Comenzamos con queques que vendíamos a diario», asegura. Parra trabaja como asesora del hogar y al llegar a casa prepara los bizcochos de distintos sabores, según los pedidos que hayan.
César es abogado, con postgrado en Derecho Penal y Criminología. Poco después de arribar, a finales de 2018, fue absorbido por una liquidadora. Actualmente trabaja para un restaurant de Sushi y al concluir jornada llega a rellenar tortas, responder mensajes de pedidos nuevos y publicar las promociones.
Simón posee estudios de Ingeniería Civil. Migró en noviembre de 2018, después de la muerte de una tía muy querida. Al llegar pegó en una amasandería chilena en la que creyeron en sus conocimientos desde el primer día.
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«En mi casa en Píritu disfrutábamos en familia: el pan de jamón, golfeados y de niño ayudaba a mi mamá y a una tía a batir bizcochos con paletas, hacer el merengue y como decorar una torta clásica», resalta.
Hoy, como equipo, ofrecen tortas temáticas y coctelería dulce, por porciones para almacenes. Además cuentan con una línea de mobiliario para eventos, al que llaman Mobilier Happy. Y esta es su reflexión: «No teníamos limitantes para conocer otras culturas, solo necesitábamos confiar en Dios y en nosotros mismos sin olvidar a los nuestros que tanto nos necesitan».
Por @CronicasDeChile