Ciudad de Panamá.- El Ministerio de Salud de Panamá (Minsa) informó este domingo que unos mil migrantes, en su mayoría provenientes de Venezuela, reciben cotidianamente atención médica en las estaciones de recepción migratoria en la provincia de Darién.
Atención integral en salud, urgencia, vacunación, saneamiento ambiental, suministro de agua potable y control de vectores en los campamentos son parte de las acciones «para garantizar una mejor condición en materia de salubridad a los migrantes en su trayecto», señaló la entidad sanitaria.
El incremento del tránsito migratorio en el país ha repercutido en que la demanda en la atención sanitaria sea mayor. Es así como se han reforzado los servicios las 24 horas del día en los puestos de recepción de Darién situados en Canaán Membrillo, Bajo Chiquito, Lajas Blancas y San Vicente, explicó el director regional de Salud de Darién, Juan Rosales. El personal que atiende a los migrantes está formado por médicos, enfermeras, técnicos de enfermería, saneamiento ambiental y equipos de vectores.
Síndromes diarreicos, infecciones respiratorias, lesiones y traumas por la travesía son las principales patologías atendidas, al tiempo que durante este mes se han intensificado las campañas de prevención por COVID-19 y viruela símica, entre otras enfermedades, indicó Rosales.
En 2021 más de 133.000 personas cruzaron la selva, una cifra histórica que podría ser superada este año, cuando hasta julio se registró el paso de más de 71.000 migrantes, más del 60% de ellos venezolanos.
Panamá acoge a los viajeros irregulares en estaciones de recepción migratorias (ERM) situadas en su frontera con Colombia (sur) y con Costa Rica (norte), donde toman sus datos biométricos y reciben alimentación y atención médica, en un operativo único en la región que consume millones de dólares anuales, como ha dicho el Gobierno.
Los viajeros, que atraviesan a pie la peligrosa selva de Darién en su ruta hacia Norteamérica, sufren asaltos, agresiones sexuales y muchos mueren, de acuerdo con sus propios testimonios.