Caracas.- Migrantes venezolanos que se encuentran durmiendo en carpas en un parque al lado de la estación policial del distrito 12 en Pilsen, Chicago, afirman que prefieren dormir en carpas a la intemperie pese al invierno, que irse a uno de los refugios dispuestos por la ciudad para atender la crisis migratoria.
Univisión Chicago detalla que la razón que dan los solicitantes de asilo es que en los refugios se pueden contagiar de enfermedades, como gripe, ya que los espacios están atiborrados de personas.
Según datos que maneja este medio, hasta el 5 de enero, han llegado a Chicago 29.657 migrantes, de los que 14.703 están distribuidos en 27 albergues, 245 están en aeropuertos y unos 150 se encuentran en las calles alojados en carpas o durmiendo en autobuses para hacer frente al inclemente clima que ha registrado temperaturas de hasta -9 °C.
«En el refugio es peor»
Un migrante venezolano que se identificó como Dennys Díaz aseguró: «En el refugio es peor, hay gripe, tuberculosis, todo junto. 1.200 personas juntas, ¡imagínese!».
Por su parte, su compatriota Alexis Sánchez afirmó que prefiere dormir en una carpa antes de ir a quedarse en los refugios.
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Algunos de los recién llegados admiten que no se han podido acoplar a la comida o a las reglas que hay en los refugios, por lo que han preferido irse a dormir en carpa.
Ciudad santuario al límite de sus capacidades
En septiembre de 2022, el estado de Texas tomó la decisión de enviar a los migrantes que ingresen a territorio estadounidense a través de su frontera, en autobuses hasta las ciudades santuario, como Chicago, Nueva York y Washington, donde las personas que tienen una situación migratoria irregular no son perseguidas y son atendidas, explica BBC Mundo.
Esta acción está hecha en el marco de la operación Lone Star (Estrella Solitaria), según el gobernador republicano de Texas, Greg Abbott, para atender la crisis fronteriza y minimizar el índice delictivo en su estado.
Desde entonces, Chicago ha registrado una llegada masiva de migrantes, mayormente venezolanos, una situación para la que no han encontrado solución.