Madrid.- La llegada de migrantes a España en 2021, ayudó a compensar el descenso demográfico del país europeo ocasionado por la caída de los nacimientos y el aumento de las muertes en ese mismo año. La población total subió hasta los 47,43 millones de habitantes.
Son datos provisionales de la estadística de migraciones y de población a 1 de enero de 2022 publicados este martes por el Instituto Nacional de Estadística (INE).
Tras seis años consecutivos de crecimiento ininterrumpido, la población residente en España alcanza un nuevo máximo histórico desde el comienzo de la serie estadística.
El alza del pasado año fue consecuencia de un saldo migratorio positivo de 148.677 personas (hubo 530.401 llegadas al país y 381.724 salidas), lo que compensó el saldo vegetativo negativo de 113.023 personas (449.270 defunciones menos 336.247 nacimientos).
Colombianos y venezolanos, los hispanoamericanos más numerosos
Entre los extranjeros que llegaron a España destaca el aumento de los italianos, con 19.093 más, seguidos de los colombianos (18.503) y los venezolanos (11.481), mientras que los que más descendieron fueron los procedentes de Rumanía (25.146 menos), Ecuador (5.755) y China (4.516).
La comunidad extranjera mayoritaria sigue siendo la marroquí, con 776.223 personas, seguida de la procedente de Rumanía (632.859), Reino Unido (316.529), Colombia (315.885), Italia (298.817) y Venezuela (220.461).
En términos relativos, los mayores crecimientos de población se dieron entre los italianos (6,8 %), colombianos (6,1 %) y peruanos (5,6 %), y los principales descensos entre los ecuatorianos (4,5 %), rumanos (3,8 %) y búlgaros (3,1 %).
Más de cinco millones de extranjeros
Señala el INE que el número de extranjeros aumentó en 49.612 personas durante 2021, hasta 5,41 millones, una subida, en su mayor parte, debida a un saldo migratorio positivo de 153.094 personas de nacionalidad diferente de la española.
Por el contrario, la población de nacionalidad española se redujo en 15.502 personas.
En cuanto a la emigración, 304.607 extranjeros se marcharon del país y 77.117 españoles, de los que 51.250 habían nacido en España.